HTC anunció uno de los smartphones que más dará que hablar, el HTC One M8. Hoy nos preguntamos qué es exactamente lo que diferencia a este teléfono de otros terminales de alta gama, como el Samsung Galaxy S5. En esta ocasión os ofrecemos cinco características bastante interesantes que no están presentes en la alternativa de Samsung o al menos, de una forma menos ‘imponente’.
Obviamente, cada uno de los smartphones tendrá sus propias ventajas e inconvenientes, pero estos cinco aspectos del HTC One M8 destacan por encima de los demás, sobre todo los que están relacionados con el diseño y la pantalla. Además, integramos detalles clave de pantalla, cámaras, procesador, memoria, conectividad y batería para que tengas una fotografía completa de ambos.
1. Altavoces frontales estéreo BoomSound
Está claro que el altavoz del Samsung Galaxy S5 es de alta calidad, como mínimo semejante al de su predecesor. No obstante, cuando se trata de ofrecer un sonido claro, nítido y profundo, no es capaz de alcanzar el nivel ofrecido por el HTC One M8 y sus altavoces BoomSound. Al ser estéreos y estar posicionados de forma frontal, el último smartphone de HTC es perfecto para disfrutar de una experiencia multimedia superior.
Como apuntes adicionales, el HTC One M8 incorpora radio FM con RDS, algo que no encontramos en el Galaxy S5, y ambos mantienen el clásico conector de 3,5 mm para auriculares. Para quienes consumen mucho contenido, la combinación de altavoces frontales y salida de audio analógico sigue siendo un punto diferencial.
2. Un diseño premium
Sí, el aluminio puede resultar algo más frío que un material basado en plástico, pero está claro que grita algo así como: “Soy especial, no como el típico teléfono con Android”. Este toque de exquisitez es algo que siempre hemos querido ver en los dispositivos de Samsung, pero parece que los surcoreanos no han tenido en cuenta las consideraciones de los usuarios, y el HTC One M8 es un gran ejemplo de cómo la compañía ha tenido siempre en cuenta la apariencia de sus productos.
Más allá de los materiales, conviene considerar que el Galaxy S5 apuesta por una trasera de policarbonato con microperforaciones y suma resistencia al agua y al polvo con certificación IP67, además de lector de huellas y sensor de frecuencia cardíaca. El One M8, por su parte, luce un cuerpo unibody metálico con curvas más ergonómicas en mano. En dimensiones y peso, el S5 es más ligero, mientras que el M8 es ligeramente más estrecho y grueso, priorizando la solidez del chasis.
3. Una pantalla más precisa
HTC siempre ha optado por incorporar paneles de alta calidad en sus terminales, y el HTC One M8 no podía ser menos. En esta ocasión se ha integrado una pantalla de 5 pulgadas con resolución Full HD (1920 x 1080 píxeles) y dos características que se diferencian bastante con respecto al panel AMOLED del Galaxy S5. 1) Es más precisa, y 2) ofrece colores más vibrantes y vivos (tal vez demasiado, pero más cercanos a los puntos de referencia en comparación con la tecnología AMOLED).
En el otro lado, el Galaxy S5 sube a 5,1 pulgadas Super AMOLED con la misma resolución, una tecnología que suele consumir menos energía y ofrece muy buena visibilidad al sol. Ambos protegen el panel con Corning Gorilla Glass 3, por lo que la resistencia frente a arañazos y golpes cotidianos está bien cubierta en los dos.
4. Una interfaz de usuario uniforme
Samsung ha hecho un trabajo encomiable a la hora de mejorar la interfaz de usuario en la última versión de TouchWiz, pero la compañía aún tiene mucho trabajo por delante para llegar al nivel de uniformidad visible en HTC Sense 6. En este último caso, la evolución ha sido mucho más consistente, con una transición más suave.
Tanto TouchWiz como HTC Sense se ejecutan sobre Android y añaden funciones propias. En general, Sense apuesta por una estética limpia y un comportamiento ágil con menos bloatware, mientras que TouchWiz ofrece un abanico mayor de funciones y servicios de Samsung. La elección aquí depende del gusto: simplicidad y cohesión o más herramientas preinstaladas.
5. Una cámara (doble) capaz de reenfocar
Llevábamos tiempo esperando un soplo de aire fresco con respecto a la fotografía en los dispositivos móviles, y el HTC One M8 lo ha conseguido gracias a su cámara dual. Si bien la cámara principal del Galaxy S5 es la mejor de los dos teléfonos, los efectos que se pueden conseguir con la del HTC y su ‘sensor de profundidad’ son bastante interesantes. Solo tendremos que echar una foto como lo haríamos normalmente y después jugar con el enfoque, algo bastante diferente a lo que nos ofrece el terminal de Samsung: entrar en un modo especial y esperar unos segundos a que cree la imagen.
Profundizando, el Galaxy S5 monta un sensor de 16 megapíxeles que puede grabar vídeo en UHD 4K a 30 fps y presume de Foco Selectivo, mientras el One M8 apuesta por su concepto Ultrapixel y Duo Camera con menor resolución nominal pero píxeles más grandes y tecnología BSI para mejorar la luz, quedándose en 1080p para vídeo. En el frontal, el HTC sube a 5 MP frente a los 2,1 MP del S5, un detalle relevante si haces muchas videollamadas o selfies.
Especificaciones y autonomía en contexto
En rendimiento, ambos comparten la familia de Qualcomm Snapdragon 801, con una ligera ventaja de frecuencia en el Galaxy S5, y la misma GPU Adreno 330. En la práctica, el día a día es muy similar, con 2 GB de RAM en los dos y una experiencia fluida en apps y juegos.
El almacenamiento parte de 16 o 32 GB y en ambos se puede ampliar mediante microSD hasta 128 GB. En conectividad, coinciden en LTE/4G Cat.4, WiFi 802.11 a/b/g/n/ac, Bluetooth 4.0, NFC y GPS con GLONASS; además, cuentan con infrarrojos para usarlos como mando. Un matiz importante: el Galaxy S5 integra microUSB 3.0 con mayores tasas de transferencia, mientras el One M8 usa microUSB 2.0 (ambos con MHL y USB OTG).
En batería, el S5 sube ligeramente la capacidad con 2800 mAh frente a los 2600 mAh del M8. También hay diferencias de diseño: la batería del Galaxy S5 es extraíble, lo que permite sustituirla, y la del One M8 es integrada. La autonomía real dependerá de tu uso (juegos, vídeo, datos, brillo), pero ambos están pensados para aguantar una jornada completa.
Carga, cargadores y accesorios
Las velocidades de carga se expresan en vatios (W). Un vataje más alto puede ofrecer una carga más rápida, siempre que el teléfono lo soporte. Para lograr la velocidad de carga anunciada es clave utilizar un cargador compatible. Algunos fabricantes incluyen cargador en la caja y otros no; cuando lo hay, es una ventaja porque evitas costes extra y aseguras la compatibilidad con el estándar del dispositivo.
En el ecosistema, el Galaxy S5 presume de integración con Samsung Gear 2 y Gear Fit, mientras el One M8 destaca por accesorios como su funda Dot View. Si te interesan los wearables o una funda con funciones inteligentes, son factores a considerar junto con las especificaciones.
¿Qué pensáis sobre estas 5 caracteristicas? ¿Es el HTC One M8 uno de los principales rivales para el Samsung Galaxy S5?
Vía Phone Arena.
Entre acabados, audio frontal, pantalla, cámaras y extras, ambos compiten de tú a tú: el HTC One M8 seduce por diseño metálico, BoomSound y su Duo Camera, mientras el Galaxy S5 convence por resistencia IP67, vídeo 4K, batería extraíble y su ecosistema. Elegir uno u otro dependerá de qué valoras más en tu uso diario.


