La función Always On es una de las más interesantes que vemos en los móviles de nueva generación con pantalla AMOLED. Nos dan la opción de acceder a muchas características sin tener que desbloquear la pantalla, y sin tener que gastar batería, o al menos eso es lo que se quiere conseguir. Ahora los Samsung Galaxy S7 y Galaxy S7 Edge se actualizan para recibir una mejora en la función Always On.
Always On más completa
Hasta el momento la función Always On era útil pero no acababa de ser más que una mejora con respecto a lo que veíamos en otros smartphones. Otros móviles ya tenían accesos directos en la pantalla sin tener que desbloquearla. Sin embargo, la gran ventaja es que la pantalla queda siempre encendida y siempre tenemos acceso a estos datos para que ni siquiera tengamos que encenderla. Eso es genial por varios motivos. Teniendo en cuenta que la tecnología de la pantalla es AMOLED, el consumo de la misma es muy bajo en todos los píxeles de color negro. Sin embargo, era necesario que se incluyeran más funciones que pudieran gustar a los usuarios.
Es el caso del Samsung Galaxy S7 y el Galaxy S7 Edge, que han recibido una actualización de firmware que amplía las características de la función Always On y que ahora incluye más novedades que solo habían llegado en el Galaxy Note 7. Entre estas novedades nos encontramos por ejemplo un nivel superior de personalización en el que podremos cambiar el color del reloj, o incluso incluir una firma en nuestro móvil para verla siempre en pantalla. Todo esto sin olvidarnos de nuevos diseños para el calendario, y de una función que sí es muy interesante, que es la de poder ver y gestionar las apps de música desde la pantalla sin tener que desbloquearla, algo genial para poder pasar a la siguiente canción, o para poder pausar la música sin necesidad de desbloquear el móvil.
Ahorrando batería
Lo mejor de la función Always On es que es una función que nos hace ahorrar más batería mientras gastamos batería. ¿Cómo? Sí, los usuarios encendemos y desbloqueamos la pantalla del móvil muchísimas veces al día, algo que gasta batería. Always On consume energía al tener la pantalla siempre activa, pero gracias a ese gasto no tenemos que desbloquear la pantalla en muchas ocasiones, ahorrando así batería. El gasto de energía siempre llega a ser inferior al 1% por hora. Eso significa que esta función podría ser responsable de gastar un 10% de la batería en 10 horas. Pero a su vez, supone un ahorro. Una característica que se convierte en imprescindible en cualquier teléfono inteligente hoy en día.