Muchos eran los que esperaban que en el transcurso de esta semana se presentara el nuevo procesador Snapdragon 820 de Qualcomm, ya que se celebraba la feria SIGGRAPH en Los Ángeles (y se había especulado que este era el momento elegido por la compañía para mostrar su nuevo SoC). Pero, finalmente, no ha sido así, aunque lo que sí se ha conocido es la GPU Adreno 530 y 510.
El caso es que esto tiene mucho más sentido, ya que en esta feria el contenido en el apartado gráfico es capital, por lo que la elección de Qualcomm tiene toda la lógica. Estas GPU, las Adreno 530 y 510, son las que serán de la partida en los Snapdragon 820 y 620/618 (respectivamente), por lo que ya se va conociendo parte de lo que darán de sí los nuevos SoC del conocido fabricante de procesadores.
Como es de esperar en una nueva generación de GPUs, lo que ofrecerá la que ha desarrollado Qualcomm es una mayor potencia a la hora de mostrar gráficos en tres dimensiones en la pantalla de los teléfonos y tablets y, además, con un consumo muy contenido. Tanto es así, que el Vicepresidente de la compañía, Tim Leland, ha indicado que el aumento del rendimiento se sitúa en un 40% respecto a generaciones anteriores y, en lo referente a las necesidades energéticas, estas bajan en un porcentaje similar gracias, entre otros factores, al proceso FinFET de 14 nm.
Algunas características importantes de la nueva GPU permitirán sin problemas el uso de arquitectura de 64 bits; soportará vídeo 4K HEVC por HDMI 2.0 a 60 fps y, de forma inalámbrica, hasta 4K a 30 fps vía Miracast; y utilizará nuevas opciones de compresión y renderizado que son las que aseguran unas menores necesidades energéticas. También se ha conocido la mejora de improveTouch, para un uso de las pantallas táctiles mejorado en todo tipo de condiciones, como por ejemplo con guantes.
Detalles a conocer
Por ejemplo, las nuevas GPU anunciadas son compatibles con los APIs OpenGL ES 3.1 y AEP (Android Extension Pack). Aparte, se añaden opciones como OpenCL 2.0, Renderscript o Vulkan para que el trabajo en multitarea y el cómputo heterogéneo sea el mejor posible. En el apartado del vídeo, se añaden las tecnologías Qualcomm EcoPix y TruePalette, que consiguen que la visualización con luz intensa sea mejor y que el rango dinámico de los colores sea mayor y esté mejor ajustado. La Adreno 530, además, se ha diseñado pensando en juegos exigentes, interfaces fluidas, navegación web pesada y experiencias de realidad virtual, donde la latencia y la eficiencia son críticas.
No se debe dejar pasar que llega Qualcomm Spectra junto a la Adreno 530 en el Snapdragon 820: se trata de una unidad de procesamiento de imágenes de 14 bits que supone un salto en calidad al hacer fotografías. Permite utilizar hasta tres cámaras de forma simultánea con una calidad de 25 megapíxeles a 30 FPS, mejorando el procesado de ruido, el enfoque en entornos de baja luz y reduciendo el “lag” del disparador hasta hacerlo prácticamente inexistente. Entre sus funciones destacadas se incluyen autoenfoque híbrido y fusión multisensor para lograr un balance de blancos más preciso y tonos de piel más naturales.
En cuanto a la posible llegada del Snapdragon 820, se espera que estos SoC estén disponibles en próximas oleadas de dispositivos, por lo que el anuncio de los modelos que lo integrarán se irá produciendo a corto plazo. Para quienes busquen contexto, la Adreno 530 ha mostrado en pruebas filtradas de GFXBench un rendimiento que supera a PowerVR GT7600 y se queda muy cerca de NVIDIA Tegra X1 en escenarios sostenidos, marcando un liderazgo claro en su segmento móvil.
Rendimiento real, juegos y compatibilidad
Sobre el papel, el +40% de rendimiento y el 40% de ahorro frente a Adreno 430 se traducen en sesiones de juego más prolongadas y estables. En títulos populares se han medido cifras en torno a 30-40 fps en PUBG o Call of Duty: Mobile, mientras que propuestas especialmente pesadas o menos optimizadas como Genshin Impact o Fortnite pueden moverse en el entorno de un dígito alto a baja decena de fotogramas si se fuerzan calidades altas. Ajustando gráficos y resolución, la experiencia mejora de forma notable gracias a la compatibilidad con Vulkan y a un pipeline gráfico más eficiente.
Más allá del gaming, el soporte de HDMI 2.0 permite sacar vídeo 4K a 60 Hz a pantallas externas y, de forma inalámbrica, alcanzar 4K a 30 Hz mediante Miracast. El motor multimedia con HEVC/H.265 acelera la reproducción y codificación de contenidos de alta resolución reduciendo consumo. Y para el uso cotidiano, la combinación de EcoPix y TruePalette ayuda a mantener buena legibilidad a plena luz y una colorimetría consistente.
La Adreno 510, por su parte, lleva parte de estas mejoras a la gama media, pensada para los Snapdragon 620/618 y equivalentes, con soporte de las mismas APIs modernas y un salto notorio frente a generaciones previas. No alcanza los picos de la 530, pero mantiene eficiencia y funcionalidades clave para multimedia y juegos casuales.
En términos de integración, el Snapdragon 820 suele combinar la Adreno 530 con un módem Snapdragon X12, habilitando altas velocidades en redes móviles, y se beneficia del proceso de 14 nm para mantener controladas las temperaturas en cargas sostenidas, algo clave frente a iteraciones anteriores.
Respecto a compatibilidad, la dupla Snapdragon 820/821 con Adreno 530 ha llegado a una amplia lista de dispositivos de referencia en su categoría: Samsung Galaxy S7/S7 Active, LG G5/G6 y V20, OnePlus 3/3T, Xiaomi Mi 5/5s/5s Plus/Mi Mix, ZTE Axon 7, Sony Xperia X Performance/XZ/XZs, Google Pixel/Pixel XL, Lenovo Moto Z y Moto Z Force, Asus ZenFone 3 Deluxe/ZenFone AR, HP Elite x3, BlackBerry DTEK60, entre otros, así como tablets como Samsung Galaxy Tab S3. Esta adopción masiva refuerza su madurez en juegos, fotografía y conectividad.
Como referencia adicional para quienes miran pruebas sintéticas, se han visto puntuaciones aproximadas en AnTuTu por encima de las 150.000 unidades, en Geekbench en la órbita de lo esperado para su CPU Kryo, y en 3DMark con resultados competitivos dentro de su clase; números que varían según dispositivo, refrigeración y versión de software.
El equilibrio entre potencia gráfica sostenida, eficiencia energética y un ISP avanzado hace de la Adreno 530 una pieza clave para experiencias fluidas en juegos, realidad virtual ligera y fotografía computacional en el ecosistema Snapdragon 820, mientras que la Adreno 510 democratiza parte de estas ventajas en segmentos más asequibles.