Android 2.3 Gingerbread fue un de las versiones más relevantes en el panorama del sistema operativo de Android. Si bien no ha sido la versión con una interfaz más elegante, sí que supuso un paso importante para que Android se convirtiera en un sistema operativo interesante. Ahora llega el final del camino para Android 2.3 Gingerbread, que ya no tendrá ningún papel en el actual Android, pero que sí quedará para la historia.
Android 2.3 Gingerbread
Antes de esta versión, Android no era más que una copia de iOS. De hecho, a partir de esta versión siguió siéndolo, pero se puede decir que fue con esta con la que comenzó a llegar una gran cantidad de usuarios al sistema operativo. Android 2.3 Gingerbread aterrizó hace ya más de seis años, y para aquel entonces no existía ni siquiera la interfaz Holo que llegó con Ice Cream Sandwich, y mucho menos la interfaz Material Design. Por aquel entonces era un Android muy diferente, pero que nos ofrecía una plataforma de aplicaciones de lo más amplia, y móviles que aspiraban a ser verdaderos rivales de los iPhone.
Hoy podemos decir adiós a Gingerbread. Los móviles que cuenten con este sistema operativo, obviamente, seguirán funcionando, pero a partir de ahora Google Play Services ya no será compatible con esta versión del sistema operativo, lo que significa que muchas de las aplicaciones que utilizan los servicios de Google ya no funcionarán, o tendrán que lanzarse versiones de la aplicación complementarias a las versiones que se desarrollan con las últimas versiones del SDK, algo que no tiene ninguna lógica. Al fin y al cabo, si Google ya ha dejado de considerar relevante esta versión, ¿por qué los desarrolladores iban a seguir dándole importancia?
Android 2.3 Gingerbread no muere, más bien llega al final del camino. Se acabó una versión que pasará a la historia, y que ha cambiado muchísimo en seis años a lo largo de todas las actualizaciones hasta llegar a Android 7.0 Nougat.