Se ha hecho de esperar, pero el nuevo Motorola Moto E ya se ha dejado ver mostrando algunos de sus características definitivas. Si ayer era un dispositivo de Sony el que aparecía en una tienda online, hoy ha hecho lo propio el modelo del que estamos hablando y se ha confirmado que este nuevo teléfono incluye soporte LTE, por lo que se podrán utilizar las redes 4G ya disponibles en muchos países.
Además, integra LTE Cat 4 (hasta 150/50 Mbps), por lo que la navegación y las descargas se benefician de velocidades muy superiores a las de la anterior generación con 3G.
Esta conectividad le iguala con el nuevo Moto G 4G del que no hace mucho hablamos en Android Ayuda que se había anunciado en la página web de Motorola en Brasil. El caso, es que el nuevo Motorola Moto E se ha podido ver en la web de Best Buy y, en ella, se han dejado ver algunos de los detalles más interesantes que tendrá el nuevo Motorola Moto E (un modelo al que le hacía falta una renovación, todo hay que decirlo).
Un ejemplo de las novedades que ofrece el nuevo dispositivo es que su pantalla pasa de las 4,3 pulgadas a las 4,5. Un aumento de tamaño no muy exagerado pero conveniente para facilitar el uso de Android Lollipop, que es el sistema operativo con el que llega como se puede ver claramente en las imágenes que dejamos en este artículo. Por cierto, la resolución no varía y se mantiene en qHD (960 x 540), ahora con panel IPS, Gorilla Glass 3 y tratamiento anti‑oleofóbico, alcanzando una densidad cercana a 245 ppp, adecuada para un modelo de gama de entrada.
Otras características de este nuevo modelo
En lo que se refiere a los componentes básicos en el apartado del rendimiento, hay que decir que sobre el papel no se aprecian grandes variaciones. Por ejemplo, la RAM de Motorola Moto E se mantiene en 1 GB, lo que es entendible, y el procesador ya no es un misterio: monta un Qualcomm Snapdragon 410 de 64 bits a 1,2 GHz, acompañado por la GPU Adreno 306. Este conjunto ofrece un desempeño solvente para tareas cotidianas (mensajería, redes sociales, navegación) y cifras de referencia en torno a los 21.000-22.000 puntos en AnTuTu, dentro de lo esperado en su segmento.
En almacenamiento, el equipo pasa a 8 GB internos (te quedarás con aproximadamente 5 GB útiles tras el primer arranque) con memoria eMMC 4.5, y mantiene la posibilidad de ampliar con microSD de hasta 32 GB en ranura dedicada. El software es Android 5.0 Lollipop prácticamente limpio, con añadidos como Moto Display y gestos rápidos para la cámara, y con opción de actualización a versiones posteriores según mercado.

Tampoco cambia el sensor de la cámara del Motorola Moto E, al menos en lo referente a los megapíxeles que ofrece la principal, ya que alcanza los 5 Mpx -la delantera se queda en VGA-. Esto permite ofrecer una solución digna en este apartado, pero poco más (sin que desentone al segmento del mercado al que va dirigido). Ahora bien, la trasera añade autoenfoque, permite vídeo en 720p y cuenta con modo HDR en el software de cámara. La frontal VGA (0,3 Mpx) sirve para videollamadas puntuales, aunque su calidad es básica y carece de flash.
Por cierto, como se pude ver en las imágenes, no dispone de dos altavoces frontales, por lo que no sigue aquí los pasos del Moto G. Conserva un único altavoz superior para llamadas y multimedia que cumple, sin alardes.
Un cambio importante
Este llega en el almacenamiento, ya que los 4 GB que ofrecía el anterior modelo ahora mismo son insuficientes. Por lo tanto, Motorola ha mejorado en este apartado duplicando la oferta del nuevo modelo. Además, no le falta el poder utilizar tarjetas microSD de ser necesarias (es compatible con modelo de hasta 32 GB).
En conectividad, el Moto E 4G integra microSIM, WiFi b/g/n (2,4 GHz), Bluetooth 4.0, GPS con A‑GPS y GLONASS, radio FM y microUSB 2.0. Es compatible con LTE Cat 4 (hasta 150/50 Mbps) y bandas habituales en Europa (1, 3, 7, 20), además de 3G en 900/2100 MHz; en algunas variantes para EE. UU. las bandas difieren. No incluye NFC ni versión dual SIM en esta variante.
Finalmente en lo referente al diseño no se aprecian grandes diferencias, mantenido las habituales formas curvadas de la parte posterior y sin disponer el Motorola Moto E de unas líneas muy rectas. Las dimensiones quedan en torno a 129,9 x 66,8 x 12,3 mm y un peso aproximado de 143‑145 gramos según versión, con construcción en policarbonato de tacto gomoso y resistencia a salpicaduras (no sumergible). En cuanto al precio, no se ha conocido cuál es el que ofrecerá libre (en la página web que se ha visto se ve la oferta específica de la tienda), por lo que habrá que esperar un poco más para tener claro este importante detalle. Como referencia, el PVP de lanzamiento de la versión 4G se situó alrededor de 129 euros en múltiples mercados, si bien puede variar por país y distribuidor.

Rendimiento real y autonomía
El Snapdragon 410 y la resolución qHD ayudan a que la experiencia sea fluida en el día a día, con multitarea básica sin sobresaltos y una navegación estable. Al exigirle con juegos 3D o con muchas pestañas pesadas, aparecen ligeros retardos propios de su segmento y de contar con 1 GB de RAM, pero no limitan usos habituales. Los añadidos de Motorola (gestos, pantalla activa) suman sin penalizar el rendimiento.
La batería de 2.390 mAh ofrece cifras muy buenas para su gama: es factible alcanzar un día completo de uso intenso con margen (en torno a un cuarto de carga al final de la jornada), y para usuarios moderados es posible llegar a día y medio. El uso de 4G puede reducir la autonomía en zonas de cobertura débil, pero el sistema incluye modo de ahorro para alargarla cuando es necesario. La batería no es extraíble ni hay carga inalámbrica.

Pantalla y diseño: experiencia de uso
La pantalla de 4,5 pulgadas con tecnología IPS ofrece buenos ángulos de visión y una reproducción de color equilibrada para su categoría. El brillo permite ver el contenido en exteriores, aunque no es tan alto como en gamas superiores; el Gorilla Glass 3 y el tratamiento anti‑huellas mejoran la durabilidad en el día a día. Los marcos superior e inferior son generosos, algo habitual en equipos de coste contenido.
El diseño mantiene la identidad de la marca: trasera curvada que se adapta bien a la mano, botón de encendido texturizado para diferenciarlo del volumen y un borde intercambiable (Motorola Bands) que, además de ofrecer agarre, permite acceso a las ranuras de microSIM y microSD retirando dicho marco. El conjunto transmite robustez y sensación de producto duradero, algo muy valorable en la gama de entrada.

Este Moto E 4G se coloca como una opción sólida para quien busca 4G, batería duradera, pantalla compacta y Android limpio a buen precio. La cámara cumple sin aspiraciones y el rendimiento es el esperado para su categoría, pero la mejora en conectividad, almacenamiento y experiencia general refuerza su posicionamiento dentro de la gama de entrada.


