Parece que una variante del Samsung Galaxy S6 ha pasado la prueba de rendimiento AnTuTu y, como es habitual, sus resultados se han publicado en la página web correspondiente. Uno de los detalles que se han conocido gracias a esta información es que el procesador de este modelo, como se esperaba, es un Exynos 7420, por lo que definitivamente se descartaría el uso del Snapdragon 810 (como todo apuntaba que ocurriría).
El caso es que este procesador que integrará el Samsung Galaxy S6 se muestra de lo más convincente en los resultados obtenidos y la puntuación que se consigue con el terminal concreto con el que se ha pasado el test sintético (SM-G925W8) demuestra que la elección del mencionado componente no es precisamente un error, ya que se alcanzan los 60.978 puntos. Es decir, todo un record.
Comparado con el Exynos 5433
Dos de las características más importantes del Exynos 7420, aparte de ser un modelo de cocho núcleos y compatible con arquitectura de 64 bits, es que su tecnología de fabricación es de 14 nanómetros, por lo que mejora las prestaciones del Snapdragon 810 -que utiliza 20 nm- y que en su interior dispone de una GPU Mali-T760. De esta forma, es capaz de reducir el calor emitido al funcionar a la máxima frecuencia y, además, su comportamiento con los gráficos en tres dimensiones se demuestra superior.
Esto último queda muy claro también en el gráfico que mostramos a continuación en el que se comparan los resultados conseguidos con el SoC utilizado en el Samsung Galaxy S6 con los que se obtienen con el modelo Exynos 5433 de la propiaSamsung que ya eran muy buenos:
Características conocidas
Como es habitual al publicarse unos resultados en un benchmark, en este caso AnTuTu, también se han publicado algunas de las características que tiene el terminal con el que se reanalizado la prueba. Y, lo cierto, es que se vienen a confirmar muchas de las que se han venido indicando que serán de la partida en el nuevo teléfono.
Un ejemplo de lo que decimos es que la pantalla tendría 5,1 pulgadas con una resolución de 2.560 x 1.440 (lo que permite una densidad de píxeles de 576 ppp). Aparte, la cantidad de RAM se situaría en los 3 GB (esto descartaría el uso de los módulos de 4 GB que la propia compañía coreana ya fabrica); el almacenamiento se situaría en los 32 GB; y, en lo referente a la cámara principal, esta integraría un sensor de 20 megapíxeles -la frontal sería de 5 Mpx-. Es decir, más o menos lo esperado.
A la espera de que este terminal, junto al Samsung Galaxy S6 Edge, sean presentados el día 1 de marzo en Barcelona, esta es la última información que se tiene sobre el nuevo modelo de gama alta de gigante asiático. Si su rendimiento es como se ha apuntado, estaremos ante una verdadera “bestia”, pero hay otros apartados que también deben ser mejorados, como por ejemplo son el diseño, nuevas funcionalidades y, como no, una interfaz TouchWiz menos intrusiva.
Fuente: MyDrivers
