Fotografía móvil (I): Regla de los tercios y Ley del horizonte

No hay que ser un fotógrafo de altísimo nivel, ni contar con una cámara profesional para poder capturar fotos de calidad con un móvil, y más si tenemos en cuenta que los móviles cuentan cada vez con cámaras mejores. Vamos a ir explicando poco a poco algunas claves para conseguir mejores fotos. Y hoy vamos a empezar a hablar de la Regla de los tercios y la Ley del horizonte.

Regla de los tercios

Cuando capturamos una fotografía, como un paisaje, lo normal para cualquier usuario que no ha capturado muchas fotografías o que no tienen ningún conocimiento, es centrar los elementos. Por ejemplo, en una puesta de Sol, podríamos pensar que lo mejor es que el centro de de la foto sea el Sol ocultándose tras el horizonte. Esto sería un error en casi todos los casos.

Si has aprendido un poco sobre fotografía, sabes que una de las cosas que primero es aprendida, y por tanto enseñada, es la regla de los tercios, y si no lo sabes, no te preocupes, porque de eso precisamente vamos a hablar.

La regla de los tercios es una guía para la composición de la fotografía. Una forma simple de entender la regla de los tercios es dividir cualquier fotografía en tres, tanto vertical como horizontalmente. Quedándonos así un rectángulo con nueve objetos rectangulares perfectos, tal y como veis a continuación.

Así, debes ubicar los elementos que quieras destacar en alguno de los cuatro cruces del centro. Es decir, a uno o dos tercios tanto vertical como horizontalmente. Claro está, esto es simplemente una regla a tener en cuenta. No hay que ser exacto. De hecho, la regla de los tercios proviene en realidad de la proporción áurea, que es la que veis a continuación.

La regla de los tercios es una aproximación, y tampoco tiene que utilizarse de manera exacta. La fotografía que podéis ver es del fotógrafo profesional Paco Jiménez, y podéis observar como el final del árbol queda exactamente en uno de los cruces, siguiendo en este caso la proporción áurea.

Ley del horizonte

Junto a la regla de los tercios, habría que hablar también de la Ley del horizonte. En primer lugar, hay que decir algo que se debe tener siempre en cuenta. Los horizontes deben ser horizontales siempre. Hay que evitar que estos aparezcan inclinados. Esto lo debéis tener en cuenta al capturar la foto, pero también podéis ajustarla posteriormente para que el horizonte quede horizontal. No obstante, la Ley del horizonte no habla de esto, sino de dónde ubicar el horizonte, utilizando como referencia la regla de los tercios. El horizonte es donde los dos elementos de un paisaje se separan. Por ejemplo, la tierra y el cielo, el agua y la tierra, o el agua y el cielo. Esta línea del horizonte, además de ser horizontal, debe coincidir con una de las líneas de los tercios de la imagen (o de la proporción áurea). Ahora bien, dado que hay dos opciones, ¿cuál de la dos elegimos? Aquella sección (tierra, agua o cielo) a la que queramos dar prioridad es la que debe ocupar los dos tercios, y la otra uno solo de los tercios. Esto dependerá de si queremos destacar el cielo nublado, o las olas del mar. La siguiente fotografía, también de Paco Jiménez, ilustra la Ley del horizonte.

Por último, debéis tener en cuenta que esto no se debe cumplir siempre a la perfección, pero sí es una referencia porque por lo general siempre se cumple. En la siguiente fotografía, es la línea de luz del Sol la que está alineada con la regla de los tercios (o en este caso, la proporción áurea).

Resumiendo, procura que el horizonte siempre aparezca horizontal, y no inclinado, y alinear este a los tercios de la fotografía, así como elementos como el Sol, las Nubes, o una ola en el mar.