Galaxy S2 actualizará a Android 4.1 Jelly Bean en noviembre

Android 4.1 Jelly Bean llegó al mundo, y ocurrió lo que todo el mundo esperaba, que las compañías se pusieran como locas a dar fechas concretas y precisas sobre cuándo y qué dispositivos actualizarían a esta última versión del sistema operativo. No, es broma, no hicieron eso ni mucho menos. Los datos que tenemos sobre los smartphones que actualizarán son muy pocos. De hecho, dentro de la familia Galaxy, sabíamos que el Note 2, el S3, el Tab 10.1 y el Nexus, seguro que actualizarían. No obstante, ahora parece que el Galaxy S2, del que todavía no teníamos datos, recibirá actualización en noviembre.

De confirmarse esto de forma oficial, actualizaría un mes después que su sucesor, el Samsung Galaxy S3. La verdad es que era de esperar que el Galaxy S2 actualizara a Android 4.1 Jelly Bean, ya que, al menos en lo que a componentes se refiere, parece capaz de hacerlo correr. No obstante, después de ver lo que ocurrió con el Galaxy S, que no actualiza para Ice Cream Sandwich, ya no se podía asegurar nada.

De hecho, hasta que no se haya publicado una actualización oficial internacional, no estaremos en disposición de decir que el Galaxy S2 actualizará con toda seguridad en nuestro país. Sin embargo, los datos que tenemos hasta ahora nos confirman extraoficialmente que así será también en España.

Y es que la noticia llega directamente de Samsung, pero de la división móvil de Suecia, que ha publicado en Facebook los planes de actualización que tienen para todos sus dispositivos durante los próximos meses. Entre todos, aparece el Galaxy S2, del cual se dice que actualizará a la versión «4.1» en noviembre. Por otro lado, la actualización del Galaxy S3 se producirá entre octubre y noviembre, según Samsung Suecia.

Eso sí, después de las publicaciones de páginas oficiales de Facebook de algunas compañías, y las correcciones posteriores por errores cometidos en estas mismas, tampoco podemos depositar toda nuestra confianza en una publicación de este tipo. No obstante, es una buena señal, ya que en realidad, las probabilidades de que ocurra de verdad son muy altas.