Los Samsung Galaxy S9 y Galaxy S9 Plus son dos de los teléfonos más esperados de 2018. La gama alta de la compañía coreana está lista para renovarse, avanzando las ideas de los Galaxy S8 sin ser una revolución. La FCC ya ha listado ambos dispositivos en su página web.
La FCC lista los Galaxy S9 y Galaxy S9 Plus, ¿posible lanzamiento en enero?
La Comisión Federal de Comunicaciones de los Estados Unidos ya ha listado por primera vez a los Galaxy S9 y S9 Plus. Respectivamente, ambos modelos responden a las denominaciones SM-G960F y SM-G965F, y su aparición justo antes de acabar el presente año 2017 podría responder a un lanzamiento temprano.
Tal y como comentan en la fuente original, el Galaxy S8 apareció listado en marzo de 2017 y se lanzó un mes después. El Galaxy Note 8 hizo lo propio durante julio y agosto de este mismo año. Y si miramos a 2016, el Galaxy S7 se listó en en febrero y se puso a la venta en marzo. Lo mismo con el Galaxy Note 7: julio y agosto de 2016. Samsung es aquí constante, y normalmente sus dispositivos aparecen un mes antes de su lanzamiento en la FCC.
Hasta la fecha, los últimos rumores situaban el lanzamiento de los nuevos dispositivos de cara al Mobile World Congress de Barcelona. Este tendrá lugar de 26 de febrero al 1 de marzo. Si Samsung mantiene su plan de actuación, estaríamos disfrutando de sus nuevos gama alta hacia finales de enero o inicios de febrero. En el CES 2018 de enero se deberían despejar las dudas, pero parece claro que se lanzarán durante el primer trimestre del año.
El resto de detalles que ofrece el hecho de que hayan aparecido en la FCC son escasos. Principalmente, se listan las conectividades de ambos terminales, que se confirman compatibles con tecnología Bluetooth y NFC. Además serán compatibles con toda la banda ancha de Estados Unidos. Esto es destacable dado que la F final de las nomenclaturas ya mencionadas, SM-G960F y SM-G965F, suelen hacer referencia al mercado internacional. En territorio estadounidense, esa F final se suele ver sustituida por una U.
Sea como sea, hay que recordar que los terminales del próximo año no serán una gran revolución para Samsung, que optará por refinar y mejorar lo que ya desarrolló para el Galaxy S8. No veremos lector de huellas bajo la pantalla ni avances en el terreno del reconocimiento facial, aunque sí una mayor reducción de sus marcos y una mejora de su carcasa trasera.
