Durante el Google I/O de ayer hubo de todo. Hay que decir que los de Mountain View dieron un verdadero espectáculo. Soy un gran fan de las keynotes de Apple, por lo bien cuidado que lo tienen todo. Pero lo que hizo Google ayer supera con creces a todas las presentaciones que había visto hasta ahora. Y sin duda, lo más espectacular fue lo relacionado con las Google Glass, las gafas futuristas de la compañía que, finalmente, ya están a la venta para un grupo selecto de desarrolladores. Asombro lo que ayer ocurrió durante la conferencia inaugural del Google I/O.
Si hay que ser sinceros, lo que más llamó la atención no fue las características de las gafas, ni la proyección de futuro que tienen, que también lo pudimos ver durante la conferencia de ayer por la tarde. Lo que atrajo todas las miradas fue el espectáculo que hicieron. Para empezar, podíamos ver en la pantalla del fondo una imagen en vídeo aérea de la ciudad de San Francisco, y un zeppelin sobrevolándola. Cuando se metieron en materia, entonces pudimos ver a los tripulantes del zeppelin, dispuesto a saltar en caída libre, cada uno de los cuales llevaba puestas unas gafas Google Glass. Entonces, pasamos a ver los puntos de vista de cada uno de ellos, por medio de una Quedada, o Hangout, de Google+. Pudimos ver todo el trayecto, cómo abrían el paracaídas, su punto de vista mientras surcan los aires, y por último, el aterrizaje en una de las azoteas de San Francisco.
Hasta aquí, todo bien. Entonces, uno de ellos pasó un paquete a un ciclista, momento en el que comenzó la exhibición sobre dos ruedas. Estos chicos, y chica, también llevaban puestas las Google Glass, por lo que podíamos ir viendo lo que sus propios ojos veían. Saltando de azotea en azotea por medio de rampas y demás, llegaron hasta otro deportista que les estaba esperando, a quien pasaron el paquete. Este descendió por la fachada del edificio, acción que también pudimos ver gracias a las Google Glass. Pasó el paquete a una última persona, montada en una bici BMX, que se metió dentro del salón de conferencias del Google I/O, esquivando a todas los asistentes, llegó al escenario, y entregó el paquete al propio Sergey Brin.
Después se habló sobre el dispositivo, las Google Glass. Estas llevan un botón para tomar capturas, llevan micrófono para que podamos interactuar con ellas, y un pequeño altavoz que puede expresarnos cosas. No obstante, su medio para comunicarse con nosotros es por medio de la pequeña pantalla que lleva en el lateral que, aunque siendo pequeña, al llevarla tan cerca nos permitirá sacarle un gran partido. Las Google Glass llevan un procesador y una memoria para almacenar datos, así como imágenes o vídeos que capturemos. No solo sirven para grabar lo que estamos viendo, también son muy útiles como asistente, pues nos dan datos sobre lo que deseemos. Podemos solicitar una ruta determinada y nos la mostrará, podemos pedirle que nos diga la velocidad a la que vamos y el ritmo que llevamos si estamos haciendo deporte, por ejemplo. Y se pusieron muchos más ejemplos de la utilidad potencial que podrían tener estas Google Glass. Un cirujano, por ejemplo, podría estar mostrando a un equipo entero de expertos la situación en la que se encuentra durante una operación, y estos podrían estar viendo lo que hace por medio de Google+. Además, podrían comunicarse con él para expresar su opinión. Por otro lado, también podrían ser muy útiles para grabar manuales o tutoriales, paso a paso, por medio de las gafas, que graban exactamente lo que está viendo el usuario.
No obstante, el potencial es demasiado grande como para controlarlo y limitarlo. Por ello, han querido que las gafas pueda ser adquiridas por los desarrolladores. Pero eso sí, de momento, tan solo los desarrolladores de Android que estuvieran presentes en el Google I/O y que fuera residentes en Estados Unidos, podían hacerse con este dispositivo. Además, el precio no ninguna baratija. 1.500 dólares por las Google Glass Explorer Edition, la primera edición que se vende de las gafas. Se prevé que lleguen al mercado en el año 2013, y esperemos que con un precio mucho más accesible.