Los botones para el control del volumen en la parte posterior del LG G2 o los sensores de huellas digitales de los iPhone 5s o HTC One Max, son sólo algunos de los ejemplos de la innovación en los smartphones actuales. En este sentido, Google no podía quedarse atrás y al parecer ha patentado el diseño de un smartphone cuya estructura sería sensible a la presión realizada por el usuario, de forma que le permitiría iniciar o llevar a cabo determinadas acciones en ciertas aplicaciones, de una forma completamente diferente a la que estamos acostumbrados hoy en día.
Con los smartphones, phablets y tablets cada vez más extendidos a lo largo y ancho del planeta, dichos dispositivos móviles nos sorprenden casi a diario con nuevas capacidades para realizar funciones anteriormente reservadas para los ordenadores portátiles cuya potencia era supuestamente mayor. Jornada tras jornada, comprobamos como ese teléfono móvil que hace no tanto tiempo nos servía únicamente para realizar o recibir llamadas, se convierte ahora en un ordenador tan completo como el que podamos tener en casa aunque, eso si, con algunas incomodidades. Porque claro, los ordenadores portátiles siguen teniendo a su favor la amplia gama de dispositivos de entrada que ponen de serie a disposición del usuario como el ratón, teclados, sensores táctiles y un largo etcétera; mientras que los smartphones cuentan únicamente con su pantalla táctil.
Google podría revolucionar el mercado de los dispositivos móviles
Según informan los compañeros de PatentBolt, Google habría presentado en la Oficina de Patentes de Estados Unidos el diseño de un smartphone cuya estructura sería sensible a la presión que pudiera ejercer sobre ella el usuario. Este ambicioso proyecto de los de Mountain View abriría la puerta a un control de las aplicaciones del dispositivo de una forma más intuitiva que con la habitual pantalla táctil.
De este modo, el hipotético smartphone sensible a la presión contaría con diversos sensores encargados de la medición de la fuerza ejercida sobre la superficie del terminal y con un procesador que se encargaría de recabar los datos recibidos y traducirlos en órdenes destinadas a las diferentes aplicaciones o funciones que pudieran estar asociadas a la acción realizada por el usuario.
Al igual que algunos reproductores de música que son capaces de pasar de canción con el único gesto de sacudir el dispositivo, podríamos llegar por ejemplo a presenciar smartphones en los que activaríamos la pantalla ejerciendo una pequeña presión sobre ellos, sin necesidad de botones o medios análogos. A modo de resumen, os ofrecemos a continuación una lista con algunas de la aplicaciones y acciones que se podrían llevar a cabo en el caso de que el diseño registrado por Google terminase cristalizando definitivamente en un smartphone con Android que llegase a los mercados de todo el mundo. ¿Cuál es vuestra opinión? ¿Veis útil un móvil sensible a la presión?
Fuente: PatentBolt
¿Otra vez esta noticia? Si ya la publicasteis anoche en el post «Google ya sabe cómo será Android en el futuro» ¿Por qué la repetís?