Google quiere oír tus llamadas para ponerte anuncios relacionados

Google ha registrado una solicitud de patente (otra cosa es que se la concedan) para oír tus conversaciones telefónicas. Pero no le importa lo que estás hablando ni con quién. Busca el ruido de fondo, para extraer información del ambiente en el que estás y así ofrecerte publicidad relacionada. Pura ciencia ficción o ¿es novela de terror?

El nombre de la patente ya da las primeras pistas: “Publicidad basada en las condiciones ambientales”. Y explica algo más: “La información sobre una condición ambiental de un dispositivo remoto es recibida, esta condición ambiental es determinada basándose en una señal procedente de un sensor del dispositivo remoto o un sensor aparejado a él. Se identifica un anuncio basado en esa condición ambiental y se envía el anuncio al dispositivo remoto”.

La idea es similar a la que los anuncios relacionados de nuestras búsquedas o los correos de Gmail. Robots de Google leen las palabras clave que buscamos o el contenido de los correos y despliegan publicidad que tenga que ver con ellos. Sólo que en este caso el proceso es algo más complejo.

La patente explica que el sistema podrá analizar los sonidos que rodean a la conversación para extraer información de dónde estamos. Por ejemplo, si se oye mal tiempo (lluvia o viento) puede devolver publicidad relacionada con la meteorología. O si estamos en un espacio cerrado, como un centro comercial, enviar anuncios de productos. Si esto se combina con la localización por GPS, se puede afinar mucho más.

Pero la patente también incluye análisis de fotografías y vídeos. Al tomar una imagen o grabar algo que subamos a la red, el sistema analizará su contenido, ofreciendo alternativas publicitarias.

Sólo es una solicitud de patente y aún queda un largo proceso para su implementación en el caso de que se aprobada, pero la idea puede provocar división de opiniones. Unos dirán que así recibirán anuncios que realmente necesitan en ese momento y otros asegurarán que es una intromisión más en su privacidad.

Vía The Next Web