Google se pone estricto con las licencias y uso de Android

Google Logo

Muchos braman contra Google y todas sus acciones. Cada vez hay más gente indignada contra el gran gigante tecnológico y todo lo que hace. Aunque realmente, habría que preguntarse, ¿y qué piensa Google de todo eso? Pese a que no lo parezca, Google no es malo de la película ni mucho menos, y al final, como todo en la vida, se trata de hacer sinergias que gusten a todos, aunque no se puede ser hipócrita, siempre habrá alguien que salga ganando.

Cuando hay algo, bien sea un producto o un servicio, que tiene una cuota de mercado que roza casi lo insultante para la competencia, es cuando se producen desequilibrios en todos los sentidos que tarde o temprano deriva en otras consecuencias. Esto es lo que podría estar sucediendo con Goolge y Android, el sistema operativo libre desarrollado por “el buscador” y que los fabricantes usan.

Pero la polémica ha surgido al conocerse que Google estaría siendo bastante más exigente con sus clientes en el uso de Android y la concesión de licencias para adaptar sus distintas aplicaciones. Ahora han saltado las alarmas sobre la verdadera “libertad” para usar Android, ya que los condicionantes para hacerlo habrían cambiado y ahora la exigencia para hacer ciertas cosas sería mucho mayor.

Google se pone las pilas y actualiza varias apps como YouTube o Gmail

Google y Android marcan el camino

Pese a que el proceso de certificación es bastante reservado, gracias a unos datos recién filtrados de un documento llamado el “Acuerdo de Distribución de aplicaciones móviles” (MAD), ahora obtenemos un vistazo más de certero de lo que sucede detrás de todo el éxito de Google y Android.

Esta no es la primera vez que hemos oído o visto información relacionada con MADA, pero la última vez fue de una versión 2009, que se remonta a la época de Android 1.1. Por ejemplo una de las cosas más curiosas que el Google Play es todo o nada, es decir, para que un fabricante tenga acceso al Play Store, un OEM tiene que estar de acuerdo para instalar el resto de aplicaciones de Google “necesarias”, incluyendo Google Voice Search, Gmail, Google Calendar, Google Talk (ahora Hangouts), Google Maps y así sucesivamente.

Además, también hay exigencias sobre la colocación de las aplicaciones, la distribución de las mismas por el terminal, y así un sinfín de cuestiones que dejan en entredicho esa “libertad” para operar con Android y todo el entorno Google. Asimismo, se exigen datos de ventas del fabricante para que Google pueda disponer de toda esa información a su antojo. Sin duda, algo que debe hacernos reflexionar sobre el poder que está adquiriendo la compañía aunque parezca de forma indirecta.

Fuente: Androidauthority