El HTC 10 ya es oficial, conoce todos los detalles de este nuevo Android

HTC 10 Sense

El nuevo modelo de gama alta de la compañía HTC se ha hecho oficial en el día de hoy. Esta es la apuesta del fabricante taiwanés para competir con los dispositivos que ya fueron presentados en el transcurso de Mobile World Congress, como por ejemplo el LG G5 o el Samsung Galaxy S7. Hablamos del HTC 10, un modelo que intentará reverdecer laureles en el mercado para este histórico fabricante de dispositivos móviles.

Como no puede ser de otra forma, el HTC 10 es un terminal que llega acabado en metal con unas líneas en las que llama la atención el evidente biselado lateral –con una pantalla acabada con cierta curvatura-que le hace tener un aspecto algo diferente al que os modelos de gama alta de esta compañía ha lanzado pero que no pierde las habituales curvas suaves de las esquinas. Es decir, cambios continuista, aunque pueda resultar paradójico decirlo. Por cierto, al terminal no le falta lector de huellas (que desbloquea el teléfono en 0,2 segundos) para de esta forma sacarle el máximo partido en lo que se refiere ala seguridad a Android Marshmallow, que es la versión del desarrollo de Google en la que se basa Sense 8 -la capa de personalización de HTC-.

Diseño del HTC 10

Por cierto, que todos los botones están en al lateral derecho del dispositivo, teniendo un acabado laminado el propio de encendido para ser diferenciado del que se utiliza para controlar el volumen. Otro detalle a considerar es que aquí también está la bandeja para la tarjeta NanoSIM que es de la partida en el HTC 10. En la parte baja es donde están tanto el puerto USB tipo C como los altavoces (compatible con BoomSound, sonido Hi-Res de 24 bits, membranas de polímero para una mejor definición y un sistema de perfil personalizado para ajustarse a lo que necesita el usuario).

Esquina del HTC 10

Hardware del HTC 10

La pantalla del lo mantiene dentro de la gama de los teléfonos, ya que es de 5,2 pulgadas con calidad QHD (2.560 x 1.440), por lo que se da un salto importante en lo referente a las resolución ya que se superan los 500 ppp en la densidad de píxeles. Por cierto, que el panel es tipo Super LCD, lo que influye positivamente en el consumo sobre el papel… pero veremos su comportamiento en lo referente a los colores y, en especial, la saturación que permite. Dos detalles a valorar: su brillo es un 30% superior respecto al modelo que sustituye y se ha mejorado la sensibilidad del panel sin que le falte protección Gorilla Glass.

Imagen parte posterior del HTC 10

En la combinación de procesador y RAM no se han corrido riesgos, pero no se desentona con los mejores dispositivos que hay en el mercado actual. Esto lo decimos debido a que el SoC es un Snapdragon 820 de cuatro núcleos (con arquitectura Kryo y frecuencia máxima de 2,2 GHz) que asegura un rendimiento que permite superar sin problemas los 120.000 puntos en AnTuTu. En el interior de este elemento hay una potente GPU Adreno 540, por lo que jugar no es precisamente un problema con el HTC 10.

En lo que se refiere al apartado de la memoria, la RAM es de 4 GB -hay una variante de tres «gigas» que apunta al mercado asiático-, por lo que sigue la tendencia actual de la gama alta de producto (un ejemplo son los comentados LG G5 o Samsung Galaxy S7), lo que indica que no se debe tener problema alguno a la hora de ejecutar todo tipo de aplicaciones -incluso si son muchas a la vez-. El almacenamiento interno es de 32 o 64 GB, con opción de aumentarlo mediante el uso de tarjetas microSD de hasta dos “teras”. Es decir, que no hay fisura alguna en este apartado.

Frontal del teléfono HTC 10

Tampoco se debe olvidar que la batería tiene una carga de 3.000 mAh, lo que asegura una buena autonomía (no le falta Modo de Ahorro). Este es un avance importante, ya que en modelos anteriores de la compañía este componente no ofrecía tantas posibilidades. El caso, es que con el HTC 10 se ha avanzado de forma notable para que iguale a la competencia y, quizá si se ha trabajado bien en Sense 8, que la supere. Aquí cabe destacar el uso de Smart-Boost, que optimiza el uso habitual del terminal, y PowerBotics, que gestiona el uso de la energía que hacen las aplicaciones para que se ahorre carga.

En lo que se refiere a la recarga, el HTC 10 es compatible con Quick Charge 3.0 (se incluye cargado en la caja). De esta forma, es posible rellenar el 50% e la batería en sólo 30 minutos con un sistema de eficiencia térmica que permite prevenir futuros problemas. Por cierto, la compatibilidad con redes LTE Cat.9 está asegurada.

HTC 10 con auriculares conectados

La cámara, elemento clave

Este es un apartado que se ha cuidado mucho en el HTC 10, ya que ahora en la gama alta este es un elemento que se revisa con mucha atención. El sensor principal es 12 megapíxeles y tipo UltraPixel (con 1,55 micras por cada píxel). Dispone de estabilizador óptico y la apertura es de f/1.8. A esto hay que sumarle grabación 4K; inclusión de ayuda al enfoque por láser; flash de dos tonos; y grabación a cámara lenta a 720p con 120 FPS. Sin duda, sobre el papel un componente de gran calidad y la vuelta de la tecnología UltraPixel una una novedad a tener muy en cuenta.

Cámar del HTC 10

El elemento frontal es de 5 megapíxeles (1.34 micras) con estabilizador óptico, ojo a este detalle, y apertura f/1.8. Por lo tanto hablamos de un componente de calidad que permite grabar a 1080p sin problema alguno.

La aplicación Cámara llega con opciones variadas, sin que le falte la denominada Pro en la que se controlan todos los apartados de las tomas (sensibilidad ISO y el balance de banco, por poner un ejemplo). Además, se dispone de diferentes Modos, como por ejemplo Zoe, Hyperlapse, Video Pic y formato RAW.

Interfaz Modo Pro de la cámara del HTC 10

Detalles finales

En lo referente a la conectividad, aparte del puerto USB tipo C que hemos mencionado antes, al HTC 10 no le falta Bluetooth 4.1; NFC; WiFi Dual Band; DLNA; y, también, soporte para DisplayPort. En el apartado de la ubicación, el terminal es compatible con GPS+GLONASS+Beidou.

Colores del teléfono HTC 10

El HTC 10 estará disponible a principios del mes de mayo de 2016 en cuatro colores diferentes: negro, plata, dorado y rojo. El precio con el que llega el terminal se sitúa en los 799 euros, por lo que no es precisamente económico (enlace), aunque este puede no ser el definitivo.