Grabación a 240 fps en móviles: sensores, modelos y guía total de cámara lenta

  • 240 fps en 1080p permite cámara lenta a 1/8 de velocidad con gran detalle.
  • Sensores como los de OmniVision integran 12 bits, HDR y PDAF para mejor calidad.
  • Modelos actuales alcanzan de 120 fps en 4K a 1920 fps en 720p según marca.
  • Sin modo nativo, apps con IA y rampas de velocidad logran resultados muy sólidos.

Grabación a 240 fps en móviles

Durante años se asumió que solo las cámaras con sensor Sony ofrecían resultados sobresalientes en móviles. La realidad es más matizada: hay terminales con sensores Sony que han rendido de forma discreta y, en paralelo, OmniVision ha firmado módulos sobresalientes. Un ejemplo es el Moto G4 Plus, muy bien valorado por su cámara pese a montar un sensor de OmniVision. La firma, además, anunció un sensor capaz de grabar a 240 fps, llamado a popularizar la cámara lenta de alta calidad en más gamas.

Grabación slow-motion

Alguien graba un vídeo con un teléfono móvil
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La cámara lenta en móviles se popularizó cuando algunos modelos comenzaron a grabar a 240 fotogramas por segundo en 720p. Desde entonces, solo ciertos buques insignia adoptaron esta función de forma consistente, pero la llegada de sensores más eficientes ha acelerado su adopción. Lo relevante del nuevo salto de OmniVision es que permite 240 fps en 1080p, duplicando la resolución habitual de las primeras implementaciones y acercando el “slow-motion” nítido a más usuarios gracias a costes más contenidos respecto a alternativas equivalentes.

Cámara Moto G4 Plus

Este sensor de OmniVision se diseñó para 12 megapíxeles con fotositos grandes (≈1,55 µm) que captan más luz, clave para reducir ruido y mejorar detalle. Además de 1080p a 240 fps, puede leer su resolución completa a 45 fps y ofrecer 4K a 60 fps. Integra ADC de 12 bits, enfoque automático por detección de fase y soporte HDR, y encaja en módulos compactos (aprox. 10 × 10 mm y 6 mm de alto). Eso sí, requiere un ISP potente y ancho de banda de memoria elevados para sostener dichas tasas.

Cómo funcionan los fotogramas por segundo

La fluidez y el efecto de cámara lenta dependen de la frecuencia de imagen (fps). Grabar a más fps captura más “instantes” del movimiento y, al reproducir a 30 fps, se obtiene el efecto de ralentización sin perder suavidad.

  • 30 fps: estándar en tiempo real; no permite cámara lenta fluida al reducir velocidad.
  • 60 fps: se puede reproducir a 30 fps con una ralentización 2× muy suave.
  • 120 fps: ofrece cámara lenta a 1/4 de velocidad; ideal para salpicaduras o gestos rápidos.
  • 240 fps: cámara lenta a 1/8 de velocidad; perfecta para deportes y acción intensa.
  • 960 fps: ultralenta (hasta 32× frente a 30 fps); revela microdetalles, con limitaciones de resolución y tiempo de captura.

Móviles destacados con cámara lenta potente

Hoy existen móviles que llevan el “slow-motion” a niveles creativos muy altos gracias a sensores y procesado avanzados:

  • Xiaomi 14 Pro: módulo triple de 50 MP y cámara lenta hasta 1920 fps a 720p, ideal para ultralenta con gran detalle.
  • ASUS ROG Phone 8: orientado a rendimiento; graba 4K a 120 fps con procesado fluido en escenas trepidantes.
  • Huawei P60 Pro: apuesta por óptica avanzada y cámara lenta a 960 fps en 1080p, incluso con luz complicada.
  • Oppo Find X6 Pro: versátil, con 480 fps en 1080p; mantiene nitidez y consistencia en diversos escenarios.
  • Vivo X100 Pro: equilibrio entre sencillez y calidad; 240 fps en 1080p para cámara lenta limpia y vibrante.
  • Realme GT 5 Pro: gran relación calidad-precio; 480 fps en 1080p para usuarios que buscan buen rendimiento sin gastar de más.

Ajustes y grabación: calidad y estabilidad

Para maximizar calidad, prioriza 4K cuando sea posible y elige los fps según tu objetivo: 24/30 fps para aspecto cinematográfico y 60/120/240 fps si planeas cámara lenta. Evita abusar del modo cine/desenfoque o reduce su intensidad para que el bokeh no se vea artificial.

La estabilización es clave: si tienes OIS, aprovéchalo; si no, valora los modos de “superestabilización” sabiendo que suelen recortar la imagen y limitar la resolución. Un gimbal externo mantiene 4K sin recortes. En códecs, H.265 ahorra espacio respecto a H.264 con calidad similar. Si tu móvil lo permite, el formato LOG ofrece más margen en etalonaje, a costa de archivos más pesados.

¿Y si tu teléfono no trae cámara lenta?

Con editores como Filmora (consulta las mejores apps para cámara lenta) puedes convertir vídeos normales en cámara lenta: ofrece control de velocidad de 0,01× a 100×, rampas para transiciones suaves y interpolación por IA para movimientos más fluidos. Para montar rápido en el móvil, CapCut es una opción muy completa con títulos, transiciones y efectos.

Ciencia práctica: 120/240 fps para medir velocidad

Si necesitas medir la velocidad o las rotaciones de un objeto (por ejemplo, una pelota), graba a 120/240 fps. Algunos móviles reproducen ese material ya ralentizado, pero los metadatos conservan la captura original. Para trabajar a fps nativos o forzar ajustes avanzados, apps como Blackmagic Camera permiten controlar fps, exposición y códec con precisión.

Para calcular velocidad lineal: mide una distancia real (m), cuenta cuántos fotogramas tarda en recorrerla y aplica: velocidad = distancia × fps / fotogramas. Para rotaciones: cuenta fotogramas por vuelta y usa rpm = (fps / fotogramas por vuelta) × 60. Así obtendrás datos consistentes incluso si el clip se reproduce en cámara lenta.

La cámara lenta a 240 fps en 1080p deja de ser exclusiva: sensores como los de OmniVision lo democratizan, los fabricantes apuestan por altas frecuencias y hoy puedes lograr resultados espectaculares con buenos ajustes, estabilización y edición; tengas o no un modo nativo, hay herramientas para conseguir una cámara lenta fluida, detallada y creativa.