La teoría del smart follower (o cómo copiar con guante blanco)

Apertura smart follower

Es curiosa la tendencia que se tiene a poner clichés a cada cosa que se hace y, muchas veces, de forma interesanda. Un ejemplo de esto es la denominación de smart follower. Este es un término norteamericano que se ha creado para definir las compañías que no arriesgan y sólo dan pasos que está seguros que funcionan. Es decir, una empresa conservadora, ni más ni menos.

Pero hay algo de “perverso” en esta denominación, ya que la utilizan también aquellos que realmente a dejar la innovación a otros para, de esta forma, no arriesgar en el mercado y sólo lanzar nuevos productos cuando ya se han demostrado que funcionan. Esto es cada vez más evidente en grandes compañías, que no desean dar pasos en falso a la hora crear nuevos productos. En realidad, yo creo que lo que ocurre es que simplemente toman la posición de copia lo que se ha demostrado que funciona, apoyándose en muchas ocasiones en una posición de dominio del mercado.

Teléfono Nokia 7250

Ejemplos de smart followers hay muchos, como por ejemplo Nokia cuando dominaba el mercado de la movilidad e, incluso, la propia Microsoft adoptó esta forma de actuar cuando Windows era el referente en el mercado de los sistema operativos. Pero, a ellos, se les tachó de inmovilistas o de ser poco ambiciosos (yo el primero). Esto se debe a que en ese momento, el concepto de smart follower no existía… una pena para ellos, evidentemente.

Pero desde hace un par de días llevo pensando que Apple ha pasado de ser un paradigma de innovación, sólo hay que recordar los lanzamientos de iPad, iPhone e iPod, a ser todo un smart follower (o lo que yo denomino un “copiador” de guante blanco). Lo primero que he de decir que es una verdadera pena, pero lo cierto es que la llegada del nuevo iPhone 6 Plus viene a confirmar esto -antes ocurrió con el iPad Air, no hay que olvidarlo-.

Básicamente lo que ha hecho la compañía de Cupertino es que, a la vista de que las mencionadas gamas de producto han funcionado, han decidido dar el paso para lanzar sus propios productos –en otras palabras, se han aburguesado- . Esto tiene una lógica empresarial indiscutible, especialmente en lo referente a los fríos números (en esto Tim Cook es todo un prodigio), pero le hace perder el “aroma” de empresa referente por innovar y ser la que “rompía moldes” y, por extensión, que era la que le daba un valor diferencial. Ahora, sinceramente, son otros lo que han heredado esa aura.

Nuevo iPhone 6 plus

El claro ejemplo de lo que estoy diciendo es Google. Es cierto que hay productos que ha lanzado que no tiene un futuro muy claro en el mercado, como por ejemplo las Google Glass, pero no es menos verdad es que han supuesto todo un espaldarazo en lo que es capaz de hacer esta compañía. Además, también trabajan en un coche inteligente (autónomo) y la evolución de Android, -con sus cosas buenas y malas-, ofrece novedades que la propia Apple hace suyas, como por ejemplo los widgets o la importancia de la notificación de los mensajes. Es decir, que son todo lo contrario a lo que es un smart follower y, curiosamente, su futuro se antoja brillante.

Y no quiero caer en la tentación de mencionad a la gama Note de Samsung, tan vilipendiada en su momento por muchos pero que, al final, se ha demostrado que la apuesta (que era eso en un principio) fue buena y, por lo tanto, en este apartado innovo. En otros no es así, evidentemente, pero lo sigue intentando con la llegada de la pantalla curva en un lateral, por ejemplo.

Gama de colores del Samsung galaxy Note 4

El futuro de un smart follower

Pues lo cierto es que no suele ser precisamente muy bueno, pero a largo plazo. Su forma de actuar cortoplacista y contemplativa le hace ir transmitiendo a los compradores y usuarios que no tienen un producto diferencial y que, además, las novedades las tienen más tardes que otros (esto suena de algo ¿verdad?). Por lo tanto, generalmente lo que ocurre es que se comienza una cuesta abajo -no muy pronunciada- en lo referente a las ventas,  y que en muchas ocasiones acaba en desastre. Esto no quiere decir que a Apple le vaya a suceder los mismo, pero lo cierto es que no es bueno ser un smart follower, por mucho que el término ahora exista y suene atractivo.

Google Glass

Además, el sector de la movilidad, y la tecnología en general, castiga a las compañías que no sea arriesgan, sin que por ello se cometan locuras, ya que el futuro de estas es una de las cosas que más se tiene en cuenta en las compañías que empresas de este sector. Por lo tanto, ser conservador no es una buena solución ni postura, ya que en el fondo copiar, por mucho guante blanco que se utilice, es simplemente eso. Ni más ni menos. Y un claro ejemplo de lo complicado que es luego acabar con el “estigma” es el que todavía tiene Samsung, ¿no?


  1.   Anónimo dijo

    Pues es admisible copiar lo que ven que tiene exito, lo que no es normal es que mientras esperan, digan que su mierda es la mejor y lo demas no sirve, para luego copiarlo, por muy hipster que se diga «smart follower», es copiar, como hacia Samsung, pero ahora se han invertido los papeles. Apple insulta la inteligencia de la gente, sobre todo de sus clientes.