Ley europea: rootear y flashear no anula la garantía de un dispositivo

Rootear y flashear ROMs en cualquier dispositivo es una de esas tareas que todos los que queremos sacar el máximo partido a nuestro Android llevamos a cabo. No obstante, lo hacemos siempre con ese pequeño temor a que todo salga mal, nos quedamos con un dispositivo no funcional, y el fabricante nos diga que la garantía no cubre una reparación de ese tipo porque la perdimos al rootear o flashear el móvil. Sin embargo, la Free Software Fundation europea, ha analizado que, según ley, en Europa, no perdemos la garantía.

Sigue sin ser una razón para hacer lo que queramos con nuestro smartphone, puesto que todas las fabricantes se saltan las leyes al crear sus condiciones de uso, o crean unas normas de utilización globales que no cumplen con todas las leyes del mundo. Sin embargo, si un fabricante quiere vender en Europa, y así lo hace, con autorización, tiene que regirse por la normativa europea, y eso supone tener que conceder una garantía de dos años a todos los componentes del dispositivo, excepto a los consumibles (en algunos casos, la batería). Y cuando hablamos de componentes, hablamos de hardware, no de software, por lo que ninguna modificación de software que no afecte al hardware debe considerarse motivo para perder la garantía del terminal.

Es cierto que cuando rooteamos podemos hacer que nuestro dispositivo trabaje por encima de sus posibilidades, y que instalando otra ROM podemos acceder a funciones que hagan que nuestro smarphone se estropee. Por ejemplo, hacer overclocking puede ser una de ellas, que es hacer que el procesador rinda por encima de lo normal. Como es obvio, hacer esto sí que es un motivo para perder la garantía. Sin embargo, los fabricantes se escudan en este tipo de cosas para argumentar que hemos perdido la garantía, cuando, realmente, no pueden hacerlo sin demostrarlo.

Si yo hago overclocking y el procesador se ha estropeado por sobrecalentamiento, el fabricante puede demostrar que así es, y solo en ese caso, nosotros tendríamos que hacernos cargo de la reparación. En cambio, si hemos instalado una ROM que nos permite tener una barra de batería en la zona superior, y hacer que nuestro dispositivo parezca visualmente un iPhone, pero se nos ha estropeado un altavoz, no hay razones para que la garantía de ese altavoz quede anulada. El fabricante está obligado a sustituir nuestro dispositivo.

Ley española: el vendedor tiene que sustituirlo

Y en España estamos aún mejor, aunque esto no sea muy extendido. Pero lo cierto es que si nuestro dispositivo ha fallado durante el primer año de uso, es el vendedor quien tiene que hacerse cargo de él. Y es el comprador, es decir, nosotros mismos, los que podemos optar por una sustitución del producto, o por una reparación del estropeado. Es más, durante ese primer año, se da por supuesto que cualquier fallo es un defecto de fábrica, salvo que el vendedor o el fabricante puedan demostrar que no es así. A partir del segundo año, es el comprador quien tiene que demostrar que el fallo proviene de un defecto en la fabricación.

Siempre está bien conocer qué dicen las leyes sobre estos asuntos, para saber cómo defendernos. Si no se cumplen estas leyes por parte de los fabricantes o vendedores, se puede denunciar a Consumo la mala actuación y exigir que se nos dé el trato adecuado con respecto a la legislación vigente. No hacerlo podría suponer graves costes económicos para la compañía, por lo que no suele haber más problema.

Más información – Free Software Fundation Europe – Ley de España para la defensa de los Consumidores y Usuarios