Cuando piensas en los colores de tu móvil, y en los colores de la vida que te rodea, muchas veces uno piensa que los colores del móvil son más reales, como más naturales, más puros. Lo curioso es que obviamente no es así. Nos hemos acostumbrado a ver los colores de forma imprecisa.
Colores irreales
Quizás fue Samsung la que inició todo esto con sus pantallas AMOLED. Estas pantallas tenía una saturación superior a la normal, y los colores se veían muy saturados. Esto siempre sorprende de un primer vistazo. Y muchos usuarios de iPhone criticaban que estos colores no eran reales. Y lo cierto es que era así. Sin embargo, eso ya no es así. Ahora la precisión de los colores es superior, y parece que las pantallas AMOLED ya están al nivel de calidad que las pantallas LCD, gestionando correctamente la saturación.
No obstante, aun así debemos ser conscientes de que cuando estamos viendo los colores de una pantalla estamos viendo colores falsos en casi todos los casos. Con el auge de las cámaras de alto nivel en los móviles, se ha vuelto imprescindible el poder visualizar las fotos tal y como se imprimirán más tarde. Pantallas sRGB, esa es la clave, y es lo que incluye el OnePlus 3. El gran problema del móvil, que la pantalla se ve aparentemente amarillenta, según afirman los usuarios. ¿Un problema técnico? No, un problema de nuestra vista, que se ha acostumbrado a verlo todo muy azulado, y que hace que cuando vemos un blanco real, lo veamos como un blanco amarillento. Queremos ver los colores en las pantallas más saturadas, pero no es lo más real. Al final, las pantallas nos han llevado a ver colores irreales, y acostumbrarnos a esto, cuando en realidad estos no son los colores que se corresponden con los blancos puros. La sobresaturación de las pantallas forma parte de la realidad actual y nos ha hecho modificar nuestro punto de vista con respecto a los colores.