Si tienes un reproductor Chromecast, ya sea de primera o segunda generación, y un terminal con CyanogenMod seguro que en más de una ocasión has tenido problemas al enviar contenidos al accesorio de Google. Lo que ocurre es que parece un pantalla completamente en negro y, esto que comentamos, ocurre desde hace tiempo… pero, por suerte, lo que decimos ha cambiado.
Lo que pasaba, según se ha podido conocer, se debe a que el funcionamiento del API Chromecast Remote Display. Este ofrecía problemas de compatibilidad con algunos procesos internos de CyanogenMod, y daba como resultado la aparición de una pantalla negra en el televisor en el que está conectado el reproductor (los fallos se encontraban en la ROM de este grupo de desarrollo, y en todas las que utilizan este trabajo como base).
Por cierto, que el fallo no sólo se presenta con la opción directa de compartir contenido con un Chromecast, ya que al utilizar la herramienta integrada en las aplicaciones, como por ejemplo Play Música u otras de terceros, también aparecía la incómoda pantalla negra en muchos casos (según los datos que se tienen en más del 80% de las ocasiones).
Al fin, una solución
Pues sí, en la última versión de CyanogenMod, en su última versión Nightly (que ha comenzado a desplegarse hace pocos días), se ha integrado unas líneas de código que arreglas el desaguisado y, por lo tanto, los problemas con Chromecast desaparecen por completo. En este enlace se puede conocer el resultado del trabajo de los desarrolladores que, además, han prometido que en próximas versiones de la ROM se incluirán avances que optimizarán el uso del reproductor de Google.
El caso es que si tienes un terminal Android con CyanogenMod (y algunos de sus derivados, como por ejemplo su propios sistema operativo que llega en terminales como los WileyFox, los conocidos problemas con Chromecast serán cosa del pasado en cuanto se reciba la nueva actualización -o, en su defecto, que se proceda a una instalación manual de esta que se ha indicado que se publicará en breve-. Buenas noticias, ¿verdad?