¡Me han estafado por WhatsApp! Esperamos que nunca tengas que decir esto, pero los hackers están multiplicando sus ataques y se vuelven cada vez más ingeniosos a la hora de diseñar sus fraudes. Por tanto, nadie está a salvo.
Los ciberdelincuentes son conscientes de que la app de mensajes instantáneos es utilizada cada día por millones de personas y, por tanto, no dudan en “echar sus redes” en ella para intentar pillarnos desprevenidos y hacerse con nuestros datos, e incluso con nuestro dinero. La prevención es la mejor herramienta de protección y, para ayudarte en esta cuestión, hemos recopilado algunas de las estafas más frecuentes. Así podrás estar alerta ante ellas.
Me han estafado por WhatsApp mediante smishing con código de verificación
El smishing con código de verificación es una técnica que a los hackers les está dando muy buen resultado, porque todavía es relativamente desconocida para los ciudadanos.
El smishing consiste en enviar un SMS en el que el ciberdelincuente se hace pasar por una entidad legítima como un banco, una Administración Pública, etc. El mensaje tiene como objetivo que acabes llamando a un número de tarificación especial, o que accedas a un enlace que te va a llevar a una web falsa en la que te sustraen tus datos.
Como esta estafa ya es bastante popular, el número de personas que caen en ella se está reduciendo. Y los estafadores están buscando nuevas alternativas. La que han encontrado es el smishing con código de verificación.
En este caso recibes en tu móvil un SMS con un código de verificación que no guarda relación con ninguna operación online que tú hayas realizado. Justo después te llega un mensaje de WhatsApp de un conocido, o incluso de un número que no tienes en tu agenda, en el que te dicen que se han equivocado y te han mandado el código a ti por error.
Si proporcionas ese código, lo que en realidad estás haciendo es darle al ciberdelincuente acceso total a tu cuenta y tus datos. Algo que este podrá aprovechar para suplantar tu identidad o para cometer otros delitos.
Estafa de la falsa identidad
Muchas de las personas que dicen “me han estafado por WhatsApp” han sido engañadas con el timo de la falsa identidad. Tan sencillo y tan efectivo que se ha convertido en uno de los favoritos de los delincuentes online.
“Hola (mamá/papá) este es mi nuevo número”, suele ser el comienzo de este tipo de mensajes, aunque también pueden identificarse como algún amigo o conocido. A continuación, te dicen que tienen que hacer un pago urgente y que necesitan que les hagas una transferencia, que luego te lo devuelven.
Si les contestas y les pides explicaciones sobre el pago, te van a embaucar dándote argumentos como que es algo que necesitan para el trabajo, y que al haber cambiado de móvil todavía no tienen operativos los datos de sus cuentas bancarias en el terminal.
La familiaridad del mensaje, y el sentimiento de urgencia que se crea, lleva a la víctima a actuar sin pensar demasiado. En lugar de llamar a su hijo o a su amigo para comprobar su identidad, no duda en ningún momento y transfiere el dinero.
La clave para el éxito de esta estafa es que las respuestas que ofrecen son tan genéricas que podrían valer para cualquier situación, y se busca en todo momento de que la víctima se sienta cómoda y segura, para que no sospeche.
El resultado es que se acaba haciendo una transferencia de un dinero del que nunca jamás se va a saber nada más.
El timo de la estafa benéfica
Estafar a la gente a costa de causas supuestamente benéficas no es ninguna novedad ni algo propio del entorno online. Pero los ciberdelincuentes han sabido adaptar este timo clásico a las nuevas tecnologías.
Todo comienza con un mensaje de WhatsApp en el que el estafador manipula emocionalmente a la víctima, y le hace creer que se encarga de ayudar a víctimas de catástrofes naturales, de guerras, etc. Incluso en algunos casos se hace pasar por una ONG.
El objetivo es despertar la solidaridad del estafado y conseguir que este haga un donativo. Como ya imaginarás, esa donación nunca llega a su supuesto destino, sino que va directamente al bolsillo del estafador.
Estafa del amor
Los conocidos como estafadores del amor suelen conectar con su víctima en redes sociales, pero no tardan demasiado en favorecer una comunicación más privada a través de WhatsApp.
Se hacen pasar por otra persona, crean una identidad totalmente falsa, y consiguen que su víctima se enamore de ellos. Una vez que la relación se ha establecido, comienzan a pedirle dinero para cubrir diferentes gastos.
La persona estafada, que en ese momento siente confianza y amor por la otra parte, suele hacer estas transferencias sin dudarlo demasiado.
Esta estafa es especialmente dañina, porque puede prolongarse durante muchos meses y costarle a la víctima mucho dinero. A ello hay que sumar el daño emocional que se sufre cuando se descubre la realidad. No solo por el timo sufrido sino también por haber estado en una relación que nunca ha existido realmente.
Me han estafado por WhatsApp: ¿Cómo nos podemos proteger para que no ocurra?
Lo mejor en estos casos es ser lo más precavidos posible y desconfiar de todo aquello que se salga de la normalidad. Para ello, nosotros te aconsejamos:
- No compartir información personal por WhatsApp con gente que no conoces.
- Si un conocido te pide dinero mediante mensaje, llama directamente a su número. Al que tienes en tu agenda registrado, no a su supuesto nuevo número.
- Nunca compartas códigos de verificación con otras personas.
- Evitar abrir enlaces.
- Ni los bancos, ni la Administración Pública ni ninguna otra entidad o empresa te van a escribir por WhatsApp para preguntarte sobre tus datos o tus claves.
- Mantén tu app de mensajería actualizada a la última versión disponible para evitar brechas de seguridad.
- Elimina o bloquea cuentas con las que no quieras interactuar. Si te ha llegado un mensaje que puede ser una estafa, no contestes y bloquea inmediatamente el número.
- Contacta con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Ellos difundirán la información sobre nuevas formas de estafa y así todos estaremos mejor protegidos.
Si cada uno de nosotros ponemos un poco de nuestra parte para detectar estafa, y alertamos a los agentes de la autoridad sobre estas, el número de personas que dirán “me han estafado por WhatsApp” será cada vez menor, y eso es muy bueno para todos.