Google lanzó Daydream en su evento para desarrolladores, su plataforma de realidad virtual con la que la compañía quiso competir de tú a tú con otras propuestas como la de Samsung. La idea es que con Daydream haya smartphones certificados para ejecutar las apps y juegos de esta plataforma con garantías. En su presentación inicial se apuntó que ninguno de los móviles del momento sería compatible con Daydream.
Daydream
Si bien Daydream parecía el futuro de la realidad virtual según Google, lo cierto es que poco tenía que ver con los móviles comunes que había entonces en el mercado. La idea de Google fue dar una certificación a aquellos móviles con las características técnicas necesarias para ejecutar aplicaciones y juegos de realidad virtual correctamente, al menos los incluidos en la plataforma Daydream que Google presentó.
Tal y como explicó Clay Bavor, director de la división de realidad virtual de Google, era muy probable que ninguno de los móviles que había entonces en el mercado fuera uno de los smartphones certificados con Daydream. Eso significaba que ninguno de los que existían, incluyendo algunos como el Samsung Galaxy S7 o el HTC 10, por ejemplo, serían compatibles con Daydream en ese momento.
Siguiendo este razonamiento, Clay Bavor afirmaba que si un usuario quería de verdad tener un móvil compatible con Daydream, lo recomendable era esperar a nuevas generaciones de teléfonos.
Esto nos generaba diferentes planteamientos. Por un lado, ¿sería necesario contar con un móvil de nivel aún superior al de los buques insignia para poder ejecutar apps y juegos de Daydream? De ser así, estos smartphones serían especialmente caros, y no veríamos muchos móviles de gama media. Claro que, es posible que lo que ocurría es que los móviles de entonces, incluso los de gama alta, no contaban con el hardware específico, que no encarecería mucho el precio, pero seguía siendo imprescindible para recibir la certificación Daydream. Sea como sea, parecía que, al menos de momento, Daydream seguiría siendo solo una plataforma, y que los smartphones compatibles no llegarían hasta algún tiempo después.
Smartphones certificados con Daydream
Con el paso del tiempo, Google y los fabricantes trabajaron para que llegasen modelos con el sello “Daydream Ready”. Entre los dispositivos certificados destacan:
- Google Pixel, Pixel XL, Pixel 2, Pixel 2 XL, Pixel 3 y Pixel 3 XL.
- Samsung Galaxy S8, S8+, Galaxy S9, S9+ y Galaxy Note 8.
- Motorola Moto Z, Moto Z Force y Moto Z2 Force.
- Huawei Mate 9 Pro y Mate 9 Porsche Design.
- LG V30 y V35.
- ZTE Axon 7.
- ASUS ZenFone AR (compatible con Daydream y AR avanzada).
Algunos modelos requirieron actualización de software para habilitar la compatibilidad (por ejemplo, cambios en Android y en controladores gráficos), y otros incorporaron el soporte de serie.
Requisitos técnicos para ser “Daydream Ready”
Google definió con claridad el estándar “Daydream-ready” para mantener una barra de calidad alta en VR móvil. A grandes rasgos, un teléfono debía incluir: requisitos de Daydream
- Pantalla de alta calidad entre ~4,7″ y 6″ con modo VR a 60 Hz o más, baja latencia (≈ ≤ 3 ms gris a gris) y baja persistencia (≈ ≤ 5 ms). Los paneles OLED/AMOLED eran los preferidos por su respuesta.
- Resolución al menos Full HD (1080p), recomendándose QHD (1440p) o superior para mejorar nitidez en VR.
- SoC potente con al menos 2 núcleos físicos y capacidad de rendimiento sostenido para evitar “thermal throttling”.
- Gráficos modernos con compatibilidad OpenGL ES 3.2 y Vulkan.
- Decodificación de vídeo eficiente: H.264, HEVC y VP9 hasta resoluciones elevadas (p. ej., 4K@30 fps en ciertos perfiles) para streaming y experiencias 360°.
- Sensores de alta fidelidad: giroscopio, acelerómetro, magnetómetro y soporte android.hardware.hifi_sensors para un seguimiento de cabeza preciso.
- Bluetooth 4.2 LE con Data Length Extension para el controlador y accesorios.
Para experiencias de VR más básicas (como Cardboard) bastaba con giroscopio y acelerómetro y versiones relativamente antiguas de Android o iOS; sin embargo, Daydream exigía una configuración mucho más estricta para ofrecer comodidad, estabilidad visual y baja latencia.
Daydream, AR y Project Tango
El camino de Google hacia la VR y la AR estuvo marcado por Daydream y Project Tango. Tango introdujo la llamada “inteligencia espacial” en móviles mediante un sistema de cámaras y sensores de profundidad capaz de entender el entorno en 3D.
Dos hitos relevantes fueron el ASUS ZenFone AR, primer smartphone compatible a la vez con Daydream y Tango, y el Lenovo Phab 2 Pro, pionero en traer Tango al mercado con un sistema de tres cámaras, medición de objetos y ubicación de elementos virtuales en tiempo real.
Estado del soporte y disponibilidad
Aunque Daydream amplió el catálogo de móviles compatibles, con el tiempo Google dejó de dar soporte activo a la plataforma. La app de configuración dejó de actualizarse, el visor Daydream View dejó de venderse oficialmente y algunas generaciones posteriores de teléfonos, como la familia Pixel más reciente tras las primeras, ya no se certificaron para Daydream.
En determinadas versiones modernas de Android, Daydream puede no funcionar correctamente o directamente no estar disponible, aunque muchas apps y experiencias VR de terceros siguen existiendo como aplicaciones independientes en Google Play. Si conservas un móvil certificado y un visor compatible, aún es posible disfrutar de contenido VR que no dependa del ecosistema Daydream.
Daydream marcó un antes y un después al exigir un perfil de hardware específico y alinear a los fabricantes en torno a una experiencia VR móvil de alta calidad. La lista de terminales certificados demuestra que la compatibilidad fue una meta alcanzable para la gama alta, mientras que funciones, sensores y pantallas impusieron un filtro técnico que elevó el listón respecto a la VR móvil básica.
