El acceso de los jóvenes a internet es cada vez más temprano, y todos sabemos que esto implica ciertos riesgos. Por eso, las redes sociales están implementando mecanismos de control parental que garantizan un uso más seguro. La novedad en este campo son las medidas para controlar a los adolescentes en YouTube.
Un nuevo sistema lanzado por la plataforma, y que te va a ayudar a gestionar mejor el contenido al que tus hijos tienen acceso. Así, la experiencia de navegación y entretenimiento será satisfactoria y segura para todos.
¿Qué riesgos supone YouTube para niños y adolescentes?
Esta plataforma de vídeos es una de las más populares a nivel mundial, y tiene una gran cantidad de público entre los más jóvenes. Aunque se intenta controlar al máximo el tipo de contenido que se sube, no siempre los vídeos son adecuados para todas las edades.
Si dejas que tus hijos utilicen YouTube, ten en cuenta estos riesgos:
Exposición a contenido inadecuado
A pesar de los filtros que se pueden aplicar y de las medidas de control parental que ya tiene en marcha la plataforma, los menores pueden llegar a estar expuestos a contenido que no es adecuado para su edad. Esto incluye:
- Violencia.
- Lenguaje inapropiado.
- Temas sensibles como desórdenes alimentarios o autolesiones.
- Contenido sexual.
- Noticias falsas.
- Retos virales peligrosos.
Publicidad engañosa y comercialización
Algunos de los anuncios que van dirigidos al público infantil y adolescente pueden ser engañosos o inapropiados. Aunque se está intentando limitar, también algunos creadores de contenido promocionan productos de una forma poco ética.
Riesgos de seguridad en línea
Al ser una red social, también hay interacción entre los usuarios, y esto puede dar lugar a conductas como ciberacoso a través de los comentarios. Y, desafortunadamente, existen depredadores en línea que utilizan este medio para contactar con menores.
Además, sin ser conscientes del riesgo que supone, los niños pueden llegar a compartir en vídeos o comentarios información de carácter personal.
Efectos psicológicos y emocionales
La adolescencia es una etapa complicada y es normal que los jóvenes se comparen unos con otros. En YouTube, el público sigue la vida “perfecta” de los influencers y esa comparación puede acabar afectando a su autoestima y su bienestar emocional.
Además, el algoritmo de YouTube está diseñado para que el público pase mucho tiempo delante de la pantalla. Esto puede dar lugar a una adicción, por lo que es importante buscar medidas que ayuden a controlar el tiempo de uso.
Nuevas medidas para controlar a los adolescentes en YouTube
Existen riesgos, sí, pero no por eso vamos a obligar a los más jóvenes de la familia a estar desconectados del mundo virtual, porque este se ha vuelto esencial hoy en día. Lo que sí podemos hacer como adultos es mejorar el control que ejercemos sobre el tiempo que pasan niños y adolescentes en YouTube y el tipo de contenido que consumen.
La última novedad en este sentido ha llegado de la mano de la propia plataforma, a través de una herramienta que ya se está desplegando a nivel mundial. Con ella, va a resultar mucho más sencillo estar al tanto de la actividad que los adolescentes tienen en YouTube.
Madres y padres vinculan sus cuentas y las de sus hijos con el nuevo Centro Familiar de YouTube, y desde un único panel de control se puede tener acceso a las descargas realizadas, las suscripciones y los comentarios. Además, en el caso de menores que son creadores de contenido, los padres también van a recibir una notificación por correo electrónico que incluirá consejos sobre cómo crear contenido responsable.
YouTube es una de las pocas redes sociales que presta especial atención a los menores. Hace años que cuenta con un canal propio para ellos (YouTube Kids) y que aplica medidas de supervisión para las cuentas de preadolescentes. Todas estas herramientas, así como las nuevas medidas para controlar a los adolescentes en YouTube, han sido desarrolladas con la orientación de expertos independientes en desarrollo infantil, aprendizaje digital y contenido multimedia.
Otras medidas para mejorar el uso de YouTube por parte de adolescentes
Los adultos podemos hacer mucho a la hora de conseguir que los más jóvenes hagan un uso sano de las redes sociales.
Educar sobre el consumo crítico de contenido
Hay que enseñar a los adolescentes a evaluar la veracidad de los contenidos. A identificar fuentes de confianza y a que sean conscientes de que en los vídeos pueden encontrar información falsa y manipulación.
Podemos, por ejemplo, ver vídeos con ellos y cuestionarnos después en un pequeño debate la veracidad de la información que se da en los mismos. Así, van desarrollando el pensamiento crítico y aprenden a diferenciar la realidad de la ficción.
Promover el uso de YouTube para aprender
Muchos adolescentes utilizan este canal como un medio de ocio, pero tenemos que ser capaces de hacerles ver que es mucho más. Porque resulta que YouTube está lleno de contenido académico que les puede ayudar.
En la medida de lo posible, hay que incentivar un equilibrio entre el consumo de contenido recreativo y de contenido educativo.
Fomentar hábitos saludables de consumo
Se recomienda acordar un tiempo máximo diario o semanal para ver vídeos en YouTube, a fin de evitar que se produzca el efecto “enganche”.
Una buena forma de limitar el tiempo en esta plataforma es desactivar la reproducción automática de los vídeos y enseñarles a ser más selectivos con el tipo de vídeos que desean ver.
Supervisión activa y diálogo
Siempre debe haber una supervisión activa por parte de los padres, para controlar qué contenido están consumiendo los menores. Si estos están accediendo a algo que no es adecuado para ellos, en lugar de recurrir al típico castigo de retirar el móvil, es mejor conversar sobre ello y fijar unos límites que sean válidos para todos.
Con la nueva medida de control que está implementando YouTube, llevar a cabo esta supervisión va a ser mucho más fácil, así que ya no hay excusa para no llevarla a cabo.
Dar ejemplo
Son los adultos los que deben dar ejemplo de cómo es un uso sano de las redes sociales. No podemos pedirle a un adolescente que no pase más de 45 minutos al día viendo vídeos, si somos los adultos los primeros que sobrepasamos ese tiempo.
Con unos pequeños ajustes en la conducta de toda la familia y aplicando las medidas para controlar a los adolescentes en YouTube, todos podemos hacer un disfrute más sano de la plataforma de vídeos.