“Presupuestación ruidosa”: hablar de tus deudas está de moda

  • La presupuestación ruidosa promueve la sinceridad financiera, mostrando la realidad económica de las personas sin pretensiones.
  • Lukas Battle popularizó esta tendencia al compartir su situación económica en redes sociales.
  • El movimiento busca combatir el consumismo y fomentar un estilo de vida más frugal.
  • Iniciativas para mejorar la economía personal incluyen ajustar gastos, priorizar necesidades y ahorrar regularmente.

que es presupuestación ruidosa

Las redes sociales se han caracterizado en los últimos años por el postureo. Todo el mundo muestra vidas aparentemente perfectas en las que todo les va bien y el dinero no es nunca un problema. Frente a esta visión irreal de la realidad, surge con fuerza el movimiento o tendencia conocido como presupuestación ruidosa.

Que se trata de hacer justo lo contrario que se ha venido haciendo hasta ahora. Es decir, demostrar que la realidad económica de las personas es compleja y desigual, y que no hay nada malo en fijar un presupuesto mensual y ajustarse a él.

Lukas Battle, el ideólogo de este movimiento Presupuestación-ruidosa

A finales de 2023, Lukas Battle explicaba a sus seguidores en TikTok que había decidido ser sincero con sus amigos y exponerles que no podía salir a cenar con ellos, ya que su presupuesto diario era de seis euros.

No hizo referencia en ningún momento al término “presupuestación ruidosa”, pero sí contribuyó a afianzar un estilo de vida más frugal, en el que no hay nada de lujos. Algo que encaja mucho mejor con la realidad de la generación Z, que tiene serias dificultades para encontrar un trabajo estable.

La idea que subyace es la de dejar de querer dar la impresión de que se gasta mucho dinero, y pasar a mostrar un estilo de vida ajustado a los sueldos reales y en el que las deudas son algo habitual.

Un movimiento que se opone al consumismo

se opone al consumismo

Battle explicó en una entrevista que su video viral surgió cuando se dio cuenta de que debía más dinero del que creía, y fue consciente de que en este 2024 tenía que reducir sus gastos. Decidió entonces compartir esto con sus seguidores.

Y se encontró con que había mucha gente en la misma situación. Battle no es economista, pero sí es una persona con la capacidad suficiente como para darse cuenta de que mantener un determinado estilo de vida, aunque sea por guardar las apariencias, puede ser la peor decisión que se puede tomar a nivel financiero.

A medida que la gente empieza a ser más consciente de su situación económica real y se aleja del consumismo, la idea de tener un presupuesto mensual y buscar fórmulas para ahorrar se está convirtiendo en toda una tendencia.

De ahí el nombre de “presupuestación ruidosa”, porque se trata de hacer ruido en las redes sociales. Que las personas que han abogado por un estilo de vida con menos lujos se hagan visibles y compartan su experiencia con el resto.

El consumo desmedido que siempre se ha potenciado desde las redes sociales, y que es la base de la existencia del negocio de los influencers, ha encontrado una importante barrera en TikTok. Porque ahora lo que se promueve es no gastar.

¿Cómo puedes sumarte a esta tendencia?

Trucos para ahorrar

El primer paso para unirte a este movimiento y mejorar tus finanzas personales es tener claros tanto tus ingresos como tus gastos mensuales. Y es tan sencillo como coger papel y lápiz y hacer cuentas, o usar una hoja de cálculo.

En un lado deja constancia de todos los ingresos que percibes al mes. Si vives con otras personas, sumad las cuantías que ingresa cada uno.

Después hay que registrar los gastos, y esto es un poco más complejo. Porque hay algunos que son fijos y otros que no.

Los gastos fijos son fáciles de contabilizar. Con respecto a los variables, es interesante intentar extraer una media mensual. Tratándose de gastos que no se producen mes a mes (como el pago de impuestos o de seguros), se aconseja dividir su importe anual entre 12, para repartir ese coste a lo largo de todo el año.

Si a los ingresos les restamos los gastos, ya sabemos cuál es el punto de partida. A partir de ahí hay que elaborar un presupuesto que nos permita cubrir esos gastos y, a la vez, ahorrar un poco. Por lo que será necesario ajustar los gastos:

  • Elimina los gastos hormiga o redúcelos al mínimo. Son esos que no son realmente necesarios, como lo que gastas mensualmente en tomar café fuera durante tu jornada laboral. Si te compras un termo, vas a reducir ostensiblemente ese gasto.
  • Prioriza tus gastos. Determina cuáles son los gastos realmente necesarios que debes cubrir sí o sí pase lo que pase.
  • Busca productos o servicios más baratos. Tratándose de gastos fijos y necesarios, intenta reducir su importe comprando productos más baratos o servicios más económicos. Por ejemplo, cambia de compañía de teléfono a una más barata, o reposta combustible en una gasolinera con precios más bajos que la que visitas habitualmente.
  • Convierte el ahorro en un gasto. Decide qué cantidad vas a ahorrar cada mes, y gestiona esta partida como si fuera un gasto prioritario. En cuanto cobres, destina ese dinero a una cuenta corriente que solo vas a usar para ahorrar.

Ahora que tienes tu presupuesto listo, es momento de hacer el esfuerzo de seguirlo. Porque de nada sirve tener un plan si luego no te ajustas a él. Está claro que vas a tener que hacer algunos sacrificios para formar parte del movimiento de la presupuestación ruidosa, pero vas a lograr mejorar tu calidad de vida y tu situación económica.

Algunos trucos para ahorrar

Crear presupuesto

Ajustar tu presupuesto te resultará más sencillo si sigues unas pautas básicas de ahorro. Estas que recopilamos para ti nos parecen especialmente útiles.

  • Paga tus deudas. Si tienes deudas que generan intereses, como préstamos o tarjetas de crédito, intenta priorizar su pago. Piensa que, una vez que estén saldadas, tendrás mayor poder adquisitivo.
  • Compra de forma inteligente. Planifica tus gastos, compara precios y busca ofertas y cupones. Considera otras alternativas de ahorro como comprar productos de segunda mano.
  • Evita las compras por impulso. Cuando aparezcan las ganas de comprar algo que no necesitas, date 24 horas para reflexionar. Pasado ese tiempo, seguramente te darás cuenta de que ese gasto no era realmente necesario, y te sentirás orgulloso de ti mismo por el control que estás desarrollando.
  • Establece un día sin gastos. Fija un día a la semana en el que te comprometes a no hacer ningún gasto que no sea absolutamente necesario.
  • Revisa tus facturas. Comprueba lo que pagas por los servicios contratados y busca alternativas de ahorro. Como cambiar de compañía eléctrica o de aseguradora.

La presupuestación ruidosa es un movimiento que nos invita a ser conscientes de nuestra situación económica y a tomar medidas sencillas y viables para mejorarlas. ¿Te apuntas a esta corriente?