El nivel de luminosidad de nuestro smartphone es algo que podemos variar de forma manual, o que podemos dejar que se gestione de forma automática. Sea como sea, lo importante es conocer todas las opciones que tenemos, y una de ellas tiene que ver con la gestión de la luminosidad. Podemos llegar a niveles más altos y más bajos si activamos el brillo automático.
Brillo automático
Por lo general, cuando hablo del brillo automático, siempre recomiendo desactivarlo. No me gusta lo que tarda el brillo automático en cambiar el brillo de la pantalla de mi móvil. No me gusta tampoco el hecho de que el sensor de luminosidad consuma batería. Así, el brillo automático no es algo que me guste especialmente. Siempre lo tengo desactivado, y suelo gestionar el brillo de forma manual. Lo más complicado es cuando salgo a la calle y hay mucha luz y me cuesta localizar el indicador de brillo para subir la luminosidad de la pantalla. Sea como sea, a mí no me gusta el brillo automático.
No obstante, lo cierto es que a veces es útil. ¿Por qué? Porque hay opciones a las que solo se llegan con el brillo automático. Por ejemplo, esto tiene que ver con los niveles a los que se puede llegar con el brillo automático, y a los que no se puede llegar con el brillo manual. El nivel de luminosidad de la pantalla se mide en nits. Cuando nosotros tenemos el brillo automático desactivo y llevamos el brillo al mínimo o al máximo, llegaremos a cifras mínimas y máximas que están determinadas en cada smartphone.
Sin embargo, estas cifras mínimas y máximas normalmente son más bajas y más altas cuando el brillo automático está activo. Es decir, el nivel de brillo de pantalla podrá ser más bajo o más alto cuando el brillo automático está activo. Supongamos que es de noche y que bajamos el brillo al mínimo, pero queremos que la pantalla esté todavía más oscura. Lo ideal es poner el brillo en automático, porque el sensor de luminosidad verá que hay poca luz, y podrá llevar el nivel de luz de la pantalla a un nivel inferior. Lo mismo ocurrirá en la calle cuando haya mucha luz.
Así, aunque yo no recomiendo el brillo automático, lo cierto es que a veces es útil y es bueno utilizarlo.
