Hace años, tener una web parecía imprescindible para tener alguna presencia en el mundo. Hoy en día ocurre algo parecido con las aplicaciones. Todo tipo de establecimientos comercial tiene que tener una app, y todos la intentan promocionar, obligándonos a instalarla en nuestro móvil, y ocupando espacio de forma estúpida. Vamos a dar algunos ejemplos de estas apps, de por qué deberían desaparecer, y de cómo el futuro puede mejorar esta situación.
Apps de sitios de comida
Voy a poner los dos ejemplos más clásicos, pero puede aplicarse cualquier otro. Las aplicaciones de McDonalds y Burger King. Estas dos apps las acabamos instalando en el móvil porque es una de las formas más rápidas, o a veces la única, de conseguir las ofertas que tienen disponibles estos dos restaurantes de comida rápida. El gran problema es que las utilizamos solo cuando vamos a estos sitios, y no siempre vamos a estos sitios. Si nuestro móvil ya no tiene mucho espacio, tener que instalar cada una de las aplicaciones de cada uno de estos sitios es un problema, y si tenemos que instalarla antes de ir a cada uno de los establecimientos tardaremos muchísimo. Al final, es una gran molestia tener que llevarlas instaladas.
Apps de tiendas de ropa
Situación parecida es la de las apps de tiendas de ropa. Y no lo entiendo. Se supone que muchas tiendas de ropa se agrupan en centros comerciales para beneficiarse del volumen de personas que van por allí. Pero luego hacen lo opuesto con sus aplicaciones. Una app independiente para cada una de las tiendas cuando se trata de las tiendas de un mismo grupo. Veáse aquí el caso de Inditex con las apps de Zara, Pull&Bear, Bershka, etc… Incluso me planteo si no sería más inteligente agruparlas todas en una única app a la que acceder y poder navegar por todas las tiendas. Los usuarios tendrían más artículos para ver y podrían pasar de una tienda a otra rápidamente.
Al final, si tengo problemas de espacio, ¿qué apps borro? ¿WhatsApp, Facebook? Está claro que serán las de Bershka y Burger King, porque ocupan espacio, las utilizo pocas veces, y cuando las vaya a volver a necesitar, ya pensaré en instalarlas, mientras que WhatsApp o Facebook las voy a utilizar en ese mismo día.
¿Cómo podría cambiar esto?
Una buena forma de cambiar esto sería realizando cambios por parte de los diferentes responsables de las apps. Darse cuenta de que no pueden tener tantas apps y agruparlas de alguna forma. En el caso de las tiendas de ropa, de los grupos, es muy fácil. Claro, McDonalds y Burger King no querrán asociarse para una única app. Ese caso es más complicado. Pero sí podría ser útil lo que presentó Google el año pasado, y que ha vuelto a estar presente en el Google I/O 2016. Se trata de las apps que se ejecutan en la Nube, en los servidores de Google, y que nos aparecen en pantalla porque se carga una pequeña parte de la app en nuestro móvil sin tener la app instalada.
Con una búsqueda en Google de «Ofertas de McDonalds», podríamos ver la app ejecutándose en nuestro navegador, en Chrome, elegir la oferta, y luego salir del navegador, borrándose la sección de la app que se ha cargado de nuestro móvil. Lo mismo podría aplicarse a las tiendas de ropa. De hecho, se planteaba incluso la posibilidad de poder realizar pagos de los productos que compremos directamente sin instalar la app, pudiendo facilitar así la compra de productos a los usuarios.
Es una característica que no está en iOS, por ejemplo, y que sí estará en Android, y que podría cambiar la forma en la que vemos las apps. Puede que dejemos de verlas como elementos individuales y que las veamos como elementos compuestos por diferentes servicios. El futuro de la informática podría determinarse por este tipo de cosas. Y parece que ese es el camino que va a seguir Google.