Asus no podía faltar entre el total de fabricantes que exponen sus modelos de telefonía móvil para este año 2013 en el MWC que ha arrancado en Barcelona. Y así, la compañía asiática, ha presentado este mediodía su nueva versión del conocido PadFone, que recibe el nombre de Asus Padfone Infinity, la tablet que se convierte en smarthphone, o el smartphone que se convierte en tablet.
El primer PadFone llegaba el pasado año al MWC 2012 como un smartphone de última generación dotado de Ice Cream Sandwich de Android con una pantalla de 4,3 pulgadas, y que al acoplarlo a la PadFone Station, se transformaba en una tablet Android ICS de 10,1 pulgadas.
Pues este año Asus repite con una nueva versión del mismo producto en el evento tecnológico de Barcelona. Esta vez la estructura híbrida del Asus PadFone Infinity viene con un smartphone con carcasa de aluminio, y una pantalla de 5 pulgadas con resolución HD y 441ppi. El procesador del teléfono será un Snapdragon 600 de cuatro núcleos a 1,7 GHz, acompañado por 2 GB de memoria RAM y una GPA Adreno 320. En cuanto almacenamiento interno, se comercializarán dos versiones de 32 GB y 64 GB, en ambos casos (ampliables mediante microSD). Unas especificaciones más que suficientes para correr Android Jelly Bean 4.2 de una manera sólida, estable y fluida.
La cámara fotográfica trasera cuenta con 13 megapíxeles y flash LED. La camara frontal desciende a los 2 megapíxeles ofreciendo la posibilidad de grabar en FullHD desde las dos cámaras.
En el terreno de la conectividad el PadFone Infinity cuenta con la última tecnología, con soporte para LTE y DC-HSPA+, además de las ya clásicas conectividades en smartphone: NFC, Bluetooth 4.0, Wi-Fi, GPS con GLONAS.
Asus promete una autonomía de hasta 19 horas con el nuevo PadFone Infinity gracis a su batería de 2400 mAh.
Por otra parte tenemos la tableta que presentan este año para albergar al smarthphone PadFone Infinity, que como en la versión del año pasado contará con una pantalla de 10,1 pulgadas, pero esta vez con una resolución FullHD a 1920×1200 píxeles y una batería de 5000 mAh. La tablet toma la potencia de cálculo del PadFone, es decir, no trae ni sistema operativo ni procesador propio ya que usa los del smartphone.
Los principales factores diferenciadores del Padfone Infinity frente al resto de smartphones de la compentencia son los dos accesorios de su predecesor: el stylus, y el dock.
El precio de lanzamiento del dispositivo es de 799 libras con los accesorios y probablemente su salida comercial no la primera mitad del año, tal como ocurrió el año pasado. No se sabe el precio exacto con el que se etiquetará este el Padfone Infinity en el resto de Europa, aunque seguro que los costes se mantendrán tan desorbitados tanto en libras como en euros.