Caso Samsung-Apple-HTC – Capítulo 1

Sabíamos que Samsung estaba extremadamente interesada en conocer los detalles del acuerdo entre Apple y HTC. Ya dijimos que esto era así. No obstante, lo que no habíamos dicho es que los americanos y taiwaneses habían acordado permitirles ver un documento redactado por el juez. En total, eran 33 palabras las que iban a transmitir a Samsung. Sin embargo, ha sido el propio juez Peter S. Grewal ha accedido a la petición de los surcoreanos, permitiéndoles llegar más allá, aunque no serán muchos los que conozcan los detalles.

No son suficientes las 33 palabras del documento redactado por el juez. Por ello, a pesar del escepticismo del juez con respecto a las intenciones de Samsung, finalmente ha ordenado a Apple y HTC que den más detalles sobre el acuerdo al que han llegado, como las tasas económicas que se han marcado. Eso sí, las tres compañías han establecido que esos documentos que se van a transferir son «Attorney’s Eyes Only», es decir, que solo podrán ser vistos por el personal legal de Samsung, y nadie más.

El objetivo de Samsung al ver estos documentos es determinar si Apple permite a otras compañías usar sus patentes después del pago por ellas, a pesar de tratarse de patentes de experiencia de usuario que la compañía americana consideraba muy especiales. De ser así, Samsung intentaría hundir el veredicto de la juez Lucy Koh, donde se le dio a Apple lo que pidió, no solo una multa a Samsung de 1.000 millones de dólares, sino también la retirada del mercado de una gran cantidad de dispositivos. Si Apple ha llegado a un acuerdo económico con HTC que les permite utilizar sus patentes especiales, eso querría decir que la compañía americana está dispuesta a aceptar que la compañía que infringe esas patentes, siga vendiendo móviles si se paga la cantidad correspondiente.

Samsung ha pagado, y mucho, con la multa que se le ha impuesto, y lo que quiere lograr es que esa multa se considere como una tasa que les permita seguir vendiendo los dispositivos. «Si a HTC se lo permiten, ¿por qué nosotros no?» sería el argumento de los surcoreanos. Sin duda, el movimiento es realmente bueno, y podría poner en un aprieto a los americanos, por lo que ya veremos qué ocurre dentro de unos meses. Pero la cosa no queda aquí, esto es solo el primer capítulo de la guerra en la que ahora también ha entrado HTC.