Apple niega la venta de un iPad a una chica de 19 años iraní

Cuando comparamos Apple con Google, siempre suele haber una diferencia muy grande. Aunque se dice que ambas dos tienen mucho poder y una ambición por conocer los datos de los usuarios, también es muy cierto que Google es mucho más liberal y abierta con sus productos que Apple. De hecho, Android es una clara evidencia de ello. Mientras que iOS es impenetrable, al menos, según las condiciones legales de la compañía de la manzana, Android está pensado para que sea abierto y utilizado como desee cada uno de los usuarios. Pues bien, ahora Apple, sigue cerrándose, ha negado la venta de un iPad a una chica, por ser de origen iraní.

¿Cuál es la diferencia entre un iPad de Apple y un tablet de Android? Una de ellas, que los iraníes sí que pueden comprar tablets Android. Y es que según un reciente caso ocurrido en Estados Unidos, Apple ha negado la venta de uno de sus tablets, un iPad, a una chica, por ser de origen iraní.

Todo comenzó cuando Sahar Sabet, que aparece en la fotografía, una ciudadana americana de origen iraní, de 19 años, poseedora de un iPhone y un MacBook Pro, decidió acudir a una Apple Store del país americano con su tío, para comprar un regalo para su primo, un iPad. Las tiendas de la manzana tienen fama por tener una atención al cliente envidiable y ejemplar, pero parece que esto va a manchar un poco su reputación.

El empleado de la tienda comenzó a tramitar toda la compra, con la simpatía frecuente de la plantilla de las Apple Store. No obstante, en el transcurso de ese proceso, Sahar comenzó a hablar con su tío en Farsi, su lengua materna, y la lengua oficial de Irán. Cuando el trabajador reconoció el acento y la procedencia del mismo, le dijo a la chica que, sintiéndolo mucho, no podía venderle el iPad, puesto que el gobierno de Estados Unidos prohíbe a Apple vender hardware a Irán.

¿Qué hizo la chica? Con su pleno derecho, podría haber montado el «numerito». No obstante, agachó la cabeza, lloró, y abandonó la tienda, para comprar el iPad por medio de la Apple Store de Internet, donde no le pusieron ningún problema. Pero la cosa no se quedó ahí, decidió contactar con los medios locales y digitales para contarles su caso, e incluso ha llegado a salir en las noticias americanas.

Es una ley de Estados Unidos

Muchas son las opiniones vertidas sobre lo ocurrido, incluso representantes del gobierno de los Estados Unidos han realizado declaraciones públicas sobre el caso. Sin querer decantarme por un lado o por otro, diré que lo que parece haber ocurrido es un fallo de interpretación. Si no me equivoco, la ley establece que Apple no puede vender dispositivos electrónicos a Irán, pero a los ciudadanos del propio país, o las personas que se encuentre allí, es decir, que no puede enviar hardware al país iraní. No obstante, sí que puede y debe vender sus productos a cualquier otro ciudadano si se encuentra dentro de Estados Unidos o de cualquier otro país autorizado por el gobierno, que son la inmensa mayoría, salvo alguno por restricciones políticas, como es Irán, o Cuba, por ejemplo.

Una confusión del empleado

En esta situación, lo más probable es que fuera un error del empleado, que confundiera los límites de la ley de ventas de los productos de Apple al extranjero, pensando que «ventas a Irán», incluía también «ventas a iraníes en Estados Unidos». Aunque el fallo no está solo ahí, Sahar Sabet es una ciudadana estadounidense, con el derecho a que se le trate como tal, tenga el origen que sea, o hable la lengua que quiera, por lo que ni siquiera debería haberse producido esa confusión. Pero ya sabemos como es Estados Unidos, cualquier error pequeño se puede convertir en un suceso histórico. En fin, ¿mancha esto el buen nombre de los empleados de las Apple Store? ¿Creéis que ocurriría igual con un dispositivo con menos restricciones como son los Android?