El Samsung Galaxy S5 podría fabricarse en fibra de carbono

Vivimos en un mundo que avanza inexorablemente. Mientras aún está caliente en nuestra memoria la noticia de los 20 millones de unidades vendidas por el Samsung Galaxy S4, la actualidad no nos da un respiro y asistimos atónitos como comienzan a barajarse posibles especificaciones con las que estará equipado el futuro Samsung Galaxy S5.

Los últimos rumores en torno al próximo buque insignia de la compañía surcoreana apuntan hacia la construcción del smartphone en fibra de carbono, la utilización de una pantalla Super AMOLED Plus y la posibilidad de hacer uso de las redes 5G – si, aunque algunos no tengamos claro aún qué teléfonos podrán hacer uso y cuando de las velocidades 4G, resulta que la industria nos lleva muchos más meses de ventaja de lo que creíamos -.

En cuanto al primer aspecto, el de que el Galaxy S5 pueda ser fabricado en fibra de carbono, la rumorología parece indicar que quedan definitivamente aparcados los rumores en torno a que el cuerpo de terminal estuviese fabricado íntegramente en aluminio. Al parecer, Samsung y el Grupo SGL habrían alcanzado un acuerdo destinado al uso de la fibra de carbono en futuros proyectos de la compañía afincada en Seúl, entre los que se encontrarían la electrónica de consumo o aplicaciones de ingeniería.

En este sentido el presidente y CEO de Samsung Petroquímica – empresa afiliada al Grupo Samsung -, Yoosung Chung, ha afirmado que los materiales ligeros han alcanzado un lugar muy importante dentro del sector de la electrónica de consumo, por lo que no parece que vayamos atener que esperar demasiado para ver un smartphone en el que materiales como la fibra de carbono reemplacen al plástico.

Otras especificaciones

Dejando a un lado la fibra de carbono, centrémonos en otras de las especificaciones que podrían llegarnos de la mano del Samsung Galaxy S5. Algunas de ellas, como la utilización de las redes 5G – una tecnología cuyo desarrollo está previsto para el 2020 – parecen más una quimera que otra cosa, con lo que resulta mucho más plausible que el Galaxy S5 aparezca en un principio con la posibilidad de hacer uso de las redes 4G – también conocidas como LTE -.

Otra de las características del futuro smartphone de Samsung, en este caso mucho más realista que la red 5G, es la posible utilización de una pantalla Super AMOLED Plus  de cinco pulgadas que dejaría fuera de juego por el momento a las pantallas flexibles pero que, aún así, seguiría siendo muy superior a las que montan en la actualidad los Galaxy S3 o S4.

Con todo y con eso no olvidemos que hablamos en todo momento de rumores, por lo que cualquier parecido entre lo que comentamos hoy y lo que podremos encontrarnos en la presentación del smartphone podrían ser meros sueños. Por lo tanto y siguiendo en la línea de las posibilidades, los últimos rumores apuntan también a la utilización de un chipset de ocho núcleos y una velocidad de reloj de dos gigas, que podría competir con el Qualcomm Snapdragon 800.

Del mismo modo, también se conjetura en torno a la posibilidad de una cámara principal de 16 megapíxeles con estabilizador de imagen, cuatro gigas de memoria RAM, otros 64 gigas de almacenamiento interno e incluso la posibilidad de cargar la batería sin cables. Todo lo anterior resulta especialmente seductor pero, por mucho que nos pueda gustar, todo parece indicar que Samsung no comenzará a dar información oficial sobre el futuro Samsung Galaxy S5 hasta bien entrado el 2014.